Vuelve la Letizia pre-princesa
El Mundial nos ha sacado a todos de nuestras casillas (a todos menos a Del Bosque), pero especialmente a la Princesa Letizia, que en la final del Mundial enterró la imagen más aburrida y gris que ha ido labrándose últimamente para mostrarse más suelta, más expresiva, relajando el protocolo y llevando las riendas de la situación.
La hemos visto gesticular sin remilgos en el palco, cuchichear al oído del Príncipe sus confidencias y saltarse el protocolo interrumpiendo incluso una entrevista en directo para saludar informalmente a Rafa Nadal.
Antes de que arrancara el partido ya advertía ella misma que le estaba costando mantener la compostura: “Estamos muy nerviosos. Estamos atacados. Cuando veníamos en el coche, decíamos, ‘vamos a estar tranquilos, estamos sentados junto a los Príncipes de Holanda, hay que mantener la compostura, pero no podemos. Estamos nerviosísimos, como toda España, tenemos el corazón en un puño. Tenemos que ganar.”.
Tras el partido, volvió a comparecer ante las cámaras, esta vez junto al Príncipe y la Reina. Estaba excitada, emocionada, nerviosa. Algunos malvados dicen que sobreactuada. Se la veía segura de sí misma, organizando la situación, desenterró a la comunicadora que lleva dentro. Dadle al play del vídeo y fijaos cómo es ella la que reparte el turno de intervención: tras hablar el Príncipe ante la alcachofa del periodista, le pone la mano en la espalda a la Reina para darle la palabra, como diciendo "venga, ahora tú". ¿Le cede por cortesía y protocolo el turno a su suegra o lo hace para quedarse en último lugar y ser ella la que diga la última palabra?
Por fin le toca hablar a ella, eleva el tono de voz por encima del Príncipe y la Reina e incide tanto en sus palabras como con sus gestos en que está “nerviosísima. No sabía qué hacer en el palco”, explica abriendo sus ojos nerviosos mientras mueve enérgicamente el puño. En estas imágenes reconocemos a la Letizia Ortiz que narraba con vehemencia las noticias en la tele y nos recuerda a la de la pedida, aquella que mandaba callar al heredero de la corona con aquel "déjame terminar".
¿Saben quién era la que jaleaba de fondo cuando Iker enganchó a Sara Carbonero y le plantó el beso del año? ¡Letizia! Como lo hubieras jaleado tú. ¡Ni corona ni gaitas!
En la recepción en el Palacio Real del día después de la gran gesta de la Selección, también la vimos suelta y segura. Mientras la infanta Elena y la Reina vestían chaquetas rojas de manga larga, Letizia optaba por un look más casual con pantalón blanco y blusa azul de escote asimétrico que dejaba ver uno de sus hombros. La vimos moverse con soltura, besar a todos los jugadores muy sonriente y ejercer de madre cuando aparecieron en la recepción las infantas con la camiseta de la selección.
¿Se suelta Letizia cuando está en acontecimientos populares de masa, camiseta y voces o es una pose para mostrarse cercana? La príncesa está rara, ¿qué tendrá la Princesa?