El documental protagonizado por Georgina Rodríguez la puso en el mapa para el gran público. Pero su hermana pequeña, Ivana Rodríguez, a quien le une una estrecha relación, lleva desde pequeña siendo su mejor apoyo. El mejor ejemplo ha tenido lugar tras el fallecimiento de uno de los bebés que la influencer esperaba junto a Cristiano Ronaldo: se desplazó desde Asturias, donde vive habitualmente, a Inglaterra para estar junto a la pareja en esos duros momentos. Y, en cualquier caso, Ivana no era una desconocida en el universo instagramero, donde acumula más de medio millón de seguidores (frente a los 37 y medio de la mayor de las Rodríguez). Con ellos comparte su experiencia con la maternidad, tras dar a luz por primera vez el diciembre pasado, o su evolución física, un tema en el que ha abundado recientemente.

Sobre la relación con su cuerpo y los cambios que este ha soportado ha profundizado largo y tendido en su cuenta de Instagram. Según lo que ha reconocido ella misma en más de una ocasión, Ivana, que se dedica profesionalmente al mundo de la estética, ha sufrido habitualmente de oscilaciones de peso. "He sido un poco yoyó con el tema peso siempre", decía en sus stories hace unas semanas. Pero los últimos años han provocado que ganase hasta treinta y cinco kilos, según lo que ella misma ha relatado. Una suma de factores, de la que forman parte una fractura de coxis, la pandemia y el embarazo de la pequeña Deva, la hija que ha tenido junto a su chico, el escultor Carlos García.

Subidas y bajadas que ella misma ha ilustrado en Instagram, publicando un par de comparativas sobre su forma física en distintos momentos de estos últimos años. Y que han generado que en algún momento de 2021 pesase 100 kilos, frente a los 65 que pesaba en 2019. Las imágenes de su propio antes y después han confundido a alguno de sus seguidores, e Ivana ha aclarado posteriormente que el contraste es verídico: "No, las fechas no están mal puestas. […] Porque a nadie le gusta mostrarse mal. En mala forma física, sin arreglar […] De ahí la confusión que ha generado mi post anterior", se explicaba.

En su perfil, la cuñada de Cristiano Ronaldo ha querido valerse de su propia experiencia para dar visibilidad sobre los problemas de sobrepeso y obesidad. Porque, aunque también le preocupa la estética, Ivana tiene claro que lo suyo es, sobre todo, una cuestión de salud: durante el embarazo los médicos le pegaron un toque de atención al respecto, algo que se volvió a repetir posteriormente por un tema de hipertensión. Y por ello ha decidido tomar cartas en el asunto, poniendo en marcha desde comienzos de 2022 lo que ha denominado en sus stories la 'Operación poderío'.

Con este proceso de recuperación de su forma física pretende encontrar su "mejor versión", mejorar su salud, su estado de ánimo, dejar de sentir el cuerpo "enfermo, pesado, cansado, viejo", en sus propias palabras. Conocedora de que su situación no tiene por qué ser extrapolable a la de otros, y animando siempre a que cada uno supervise su caso concreto con un médico o un especialista, Ivana cifraba en un principio su meta en perder 20 kilos, bajando de los 82 a los 62. Aunque posteriormente ha matizado su objetivo, dándose cuenta de que el volumen es un mejor indicador sobre la pérdida de grasa que el peso.

Para ello, Rodríguez ha apostado por actuar paralelamente sobre su alimentación y sobre su actividad física, una combinación entre el déficit calórico y el aumento del ejercicio que practica. En stories ha hablado en detalle sobre el proceso, los avances y las dificultades que está teniendo en el camino. Cambiar su forma de comer le ha costado: sus seguidores pueden dar fe de que los objetivos de comer más saludable, con menos grasas y dulces, han sido retos dificultosos para ella, aunque ha conseguido mantenerse en su empeño.

Con respecto a la actividad física, Ivana está bastante condicionada al hecho de estar de posparto, y de tener que atender a Deva, lo que limita en ocasiones el tipo de deporte y la intensidad y cantidad del mismo. Durante semanas, la pequeña de las Rodríguez ha cumplido su meta de caminar al menos 10.000 pasos diarios, y se plantea ya incorporar ejercicios de fuerza y otras modalidades deportivas. "Quiero ir con cuidado con el suelo pélvico y con la lactancia por encima de todo, pero tengo muchas ganas de entrenar más y mejor", ha admitido en stories. Aunque empezó a hacerlo todo por su cuenta, desde hace unas semanas cuenta con la ayuda y el asesoramiento de un entrenador personal, Jairo Fitness.