El mal de amores, compañero doloroso del éxito de Taylor Swift
Muchas de las mejores cantantes han realizado sus mejores discos justo después de un ruptura o un bache con sus parejas. Tal es el caso de Adele, que el año pasado estaba en lo más alto de las listas con '21', un disco compuesto con el corazón roto y la más intensas de las emociones en cada una de sus notas. Este fin de año, la número uno en ventas y premios es Taylor Swift y su situación amorosa no está mucho mejor.
Lo cierto es que, a diferencia de Adele, Taylor si escribió 'Red' coladísima. Su corazón lo ocupaba todo un Kennedy, una dinastía marcada por la tragedia que sigue siendo una de las más poderosas en EE.UU. Conor Kennedy era el "presidente" del corazón de la cantante, que además ya había sido presentada en familia con gran aceptación, sobre todo de su abuela política Ethel Kennedy, viuda de Robert F. Kennedy, mano derecha de su hermano JFK en su época en la Casa Blanca.
La relación tocó su fin porque el joven, centrado en sus estudios, no comprendía al 100% el trabajo de una estrella de pop. Tan sólo duraron tres meses, los justos para que Swift se plantee si ella está preparada para mantener una relación "normal".
Los amigos personales de Taylor lo tienen claro: "Todo lo que Taylor quiere es ser amada. Pero es prisionera de su trabajo. Ocupa todo su tiempo. Quema a sus parejas, pone mucha presión sobre ellos y eso al final mata la relación. Y luego ella se sorprende de por qué no ha funcionado", en declaraciones a US Weekly, donde añaden "Es irónico que sea millonaria por cantarle al amor".
La lista de amantes de esta joven de 23 años de Wyomissing (Pensilvania) está a la altura de sus números uno: John Mayer, Joe Jonas, Jake Gyllenhaal, Taylor Lautner y ahora hay que sumarle a Conor... pero se dice que hay uno más: concretamente Harry Styles de 'One Direction'. El británico podría haber roto el corazón de Taylor Swift en enero de este mismo año y de nuevo en octubre, cuando ésta pilló unas imágenes de Harry besando a la modelo americana Emma Ostilly durante un viaje a Nueva Zelanda. Ella, que incluso estaba pensando venirse a vivir al Viejo Continente para estar cerca de su amado, concretamente a Londres, ¿a dónde irá ahora?
Seguro que le ayudará a decidirlo su gran amiga Selena Gomez, con la que cuenta siempre que está de bajón. La propia Taylor contó que hace unos años, cuando Selena lo dejó con Nick Jonas (ella estaba con Joe Jonas), le llamó y le dijo: "Estoy allí en 10 minutos con un montón de comida basura". Una terapia peligrosa, sobre todo ahora que sabemos que tampoco Selena está en su mejor momento con Justin Bieber.
Triunfadoras de la música con mala suerte en el amor. Seguiremos las correrías de Taylor Swift en su perfil de Twitter donde todo es amor... pero para sus fans.