La boda de Ana Guerra y Víctor Elías ha situado a la cantante en el centro de la actualidad. Desde este mediodía del 31 de octubre -coincidiendo con la noche de Halloween- son muchos los rostros conocidos los que han acudido al 'sí, quiero' del actor y de la artista, como sus excompañeros de 'Operación Triunfo' o parte del elenco de 'Los Serrano', la serie que protagonizó el primo de la reina Letizia cuando solo era un niño. Todo lo que rodea a la artista canaria interesa y en su carrera artística tiene especial protagonismo su padre “todoterreno”. Antonio Guerra fue el encargado de transmitir a la joven el amor por la música y ejerció defensor de la cantante durante su paso por OT. Pero además es un abnegado enfermero que ama su profesión por encima de todo.

La vida de Antonio y el resto de la familia Guerra dio un giro de 180 grados cuando Ana entró en la célebre academia de OT el 23 de octubre de 2017. En palabras del propio Antonio, aquello fue una auténtica revolución. “Pasas de un anonimato normal a que la gente empiece a pararte, a quererte, a decirte cosas bonitas, y estoy hablando de mí, que no soy nadie. Solo soy el padre de Ana”. Los fans de su hija convirtieron a Antonio en uno más de sus ídolos y comenzaron a llamarle cariñosamente ‘Papi War’, apodo que a él le hace especial gracia.

Padre e hija están muy unidos desde siempre. Antonio compaginaba su vida como profesional sanitario con la música y de toda la vida ha tocado boleros y canciones populares en distintos grupos. Ana siempre lo ha tenido como ejemplo y antes de convertirse en famosa pensaba en seguir sus pasos: “Siempre ha sido mi otra gran vocación porque he vivido el amor por el oficio desde pequeña en casa. Ser enfermera podría ser mi plan B, me gusta cuidar de los demás”, asegura la canaria.

Tal es el nivel de vinculación que tienen padre e hija que ambos comparten un sentido tatuaje en sus respectivas pieles. Ambos tienen escrita la frase: "Querer es poder". "A su edad, hacerse un tatuaje con una filosofía así, me parece genial", ha contado Ana en una entrevista. Se trata de una filosofía que su padre ha inculcado a su hija desde que era una niña:  "Los límites te los pones tú", que lleva muy a gala la sabia filosofía del esfuerzo: "Trabajar duro y luchar", subraya.

Antonio Guerra es un hombre luchador que siempre está dispuesto a ayudar a los demás. Lo demostró en la primera gira de su hija cuando en los conciertos de OT se encargaba de atender a los fans que padecían deshidratación en los recitales. “Una imagen vale más que mil palabras”, publicó Ana en redes junto a una imagen de su progenitor asistiendo a los asistentes.

El padre de Ana también acaparó titulares cuando asistió a unos heridos de un accidente de tráfico durante unas vacaciones con su hija en Formentera. "Mi hija iba conduciendo. Paramos y atendimos a las dos chicas, pero luego hubo problemas con la ambulancia. Literalmente, me vetaron de atenderlas. Estoy dándole vueltas y estudiando la posibilidad de denunciarlos por intrusismo laboral. En aquel momento la autoridad sanitaria era yo, me identifiqué y me prohibieron subir a la ambulancia", contó indignado.

La colaboración que Isabel Pantoja y Ana Guerra tuvieron hace unas semanas permitió al padre de la futura novia conocer de cerca a la tonadillera. Su impresión no pudo ser mejor: “Me he llevado una sorpresa muy, muy grata con Isabel Pantoja, no me la imaginaba, un cariño, un acogimiento continuo, desde el primer momento en que pisamos las tablas del escenario en Tenerife, nos abrazó y nos quiso mucho, y la verdad que muy bien, muy bien”, dijo.

Casado desde hace más de 25 años con la madre de Ana, una funcionaria llamada Fátima, la pareja tiene otro hijo llamado Joaquín con el que la cantante también mantiene una excelente relación.

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