Tus botas de ante, siempre perfectas: cómo eliminar la suciedad y el polvo

El uso frecuente de nuestras botas preferidas puede dar lugar a que se ensucien con facilidad. En función del tejido con el que estén hechas su limpieza resultará más o menos sencilla, y es que no es lo mismo limpiar unas botas del piel que unas de ante. Estas últimas continúan siendo tendencia esta temporada, por lo que en Divinity te vamos a contar qué pasos debes seguir para mantener tus botas de ante como nuevas.

Lo primero que deberás hacer será pasar un paño suave y seco por toda la bota en el sentido del pelo para quitar el polvo, pero es importante que no presiones demasiado para no dañar la bota. Esto hará que se elimine todo el polvo y que la bota quede limpia.

Si tiene mucha suciedad superficial y el paño no acaba con ella, lo ideal será usar un cepillo específico para ante, aunque también podrás hacerlo con un cepillo de dientes suave.

En el caso de que esas manchas vengan porque ha llovido y la bota se ha mojado, lo mejor será que quites el exceso de agua y de humedad con un trapo suave. Podrás hacerlo con pequeños toques y, siempre, como ya hemos comentado, en el sentido del pelo de la bota.

Si observas que la bota tiene manchas de grasa, lo mejor será actuar cuanto antes, para que no se fije en el calzado. En este caso tu aliado será el talco, que se utilizará para absorber la grasa existente. Así, lo que tendrás que hacer será impregnar la bota con una pequeña cantidad de talco, dejar actuar unas doce horas y, luego, proceder a quitar el polvo con un paño suave o un cepillo de ante.

Si tu bota tiene manchas que no han salido ni con el paño ni usando talco, habrá que hacer uso de una mezcla de agua y amoniaco. Tendrás que humedecer un paño o un cepillo con esta mezcla y aplicar sobre la bota en el sentido del pelo tantas veces como sea necesario; siempre sin presionar en exceso. Tras la aplicación habrá que dejar secar la bota en algún lugar sin humedad.

Otra mezcla muy eficaz para limpiar las botas de ante será el agua y el jabón neutro. Como en el punto anterior, habrá que mojar un paño o un cepillo con la misma y aplicar sobre la bota. Una vez eliminada la suciedad habrá que dejar secar la bota completamente.