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Margarita Vargas pasó a ser conocida en España gracias a su boda con el duque de Anjou, cuando solo tenía 21 años. Había sido prácticamente un amor a primera vista y no dudaron en jurarse amor eterno en una boda por todo lo alto celebrada en 2004 en República Dominicana.
Fue un enlace al que acudieron 1500 personas, en la iglesia San Estanislao de Cracovia, y la novia lució un vestido de Victorio & Lucchino. Ahora, casi 20 años después y tras un tiempo viviendo en Venezuela, la pareja vive feliz en España junto a sus cuatro hijos. Margarita vive volcada en su familia, pero también en sus actividades solidarias y su gran pasión, la hípica.
Aunque eran poco conocidos en nuestro país, la familia de Margarita Vargas era ya toda una institución en Venezuela. Hija de Víctor Vargas y la socialité Carmen Leonor Santaella, desde muy joven Margarita formó parte de lo más granado de la sociedad del país.
Víctor Vargas es uno de los hombres más ricos de Venezuela y una de las mayores fortunas de Latinoamérica. Es propietario del holding venezolano Grupo Financiero BOD, cuyo buque insignia fue el Banco Occidental de Descuento (BOD), donde Luis Alfonso de Borbón ejerció como vicepresidente y considerado uno de los bancos más importantes del país.
También posee uno de los mejores equipos de polo del mundo, es propietario de uno de los apartamentos más caros de Nueva York y en 2017 vendió su mansión de Mar-a-Lago, en Palm Beach, Florida. Posee dos yates y tres aviones privados. Sin embargo, su vida y su fortuna no ha estado libre de polémicas, se ha visto envuelto en algunos escándalos financieros.
Tampoco su vida personal ha permanecido al margen de escándalos, en 2013 obtuvo el divorcio de Carmen Leonor, de quien llevaba cinco años separado después de más de treinta de matrimonio. Un proceso complicado que, una vez finalizado, le permitió casarse en 2014 con María Beatriz Hernández, 30 años más joven que él y junto a quien ha tenido dos hijos.
La familia de Carmen Leonor Santaella también posee una gran fortuna. Su padre fundó la Corporación Venezolana de Fomento (CFV) y participó en la creación de varios bancos en Venezuela. Tanto ella como sus hermanas formaban parte de la alta sociedad venezolana.
Durante el divorcio de sus padres, Margarita se puso del lado de su madre, lo que hizo que durante un tiempo su relación con su padre no fuera la mejor, pero parece que con el tiempo han recuperado el vínculo que tenían. La familia para ella es muy importante, está muy unida a su hermana María Victoria (tenían otro hermano, Víctor, pero falleció a los 18 años).
De hecho, fue en la boda de su hermana con Francisco Javier d'Agostino cuando conoció por primera vez a Luis Alfonso de Borbón. Él trabajaba junto al novio, con quien había forjado gran amistad y no dudó en invitarle al enlace, seguramente sin saber que cambiaría su vida para siempre.