{{#section.link.href}}
{{section.link.title}}
{{/section.link.href}}
El julio de 2010, la selección española de fútbol masculino logró una hazaña histórica al hacerse con la Copa del Mundo por primera vez en su historia. La victoria del combinado patrio frente a Países Bajos fue un verdadero hito nacional, y, desde el punto de vista del mundo del corazón, dejó, además, otra estampa para el recuerdo: el mítico beso entre Iker Casillas y Sara Carbonero, que confirmó públicamente la relación que mantenían desde hacía meses y que acabarían rompiendo en 2021. Casi catorce años después después de aquellas imágenes, la expareja sigue muy presente en el imaginario colectivo. Y en las últimas horas hemos conocido conocer cómo es la relación actual entre el exportero y la madre de la periodista.
La historia de amor entre Carbonero y Casillas fue una de esas que, fruto del contexto del mencionado Mundial, excede del ámbito de la crónica social. Todo ello pese a la gran discreción de ambos durante los once años en los que estuvieron juntos, durante los cuales se casaron en secreto y nacieron sus dos hijos en común, Martín y Lucas, de diez y siete años de edad. Y, debido a ello, el vínculo y la relación que han mantenido tras su ruptura, ha seguido generando interés.
Del exguardameta del Real Madrid y la presentadora se ha dicho en más de una ocasión que mantienen una relación cordial. Así ha podido confirmarse en estos años, en los que ha habido más de un gesto público que constata que ambos se llevan bien y se guardan mucho cariño. Sus dos hijos han sido siempre su mayor prioridad y por ellos y sus intereses han hecho siempre frente común.
El diario El Español revelaba hace un año, tras hablar con sus respectivos entornos, que Iker y Sara "han sabido ver lo bueno de su separación". El pasado mes de febrero esto quedaba evidenciado de nuevo con la asistencia de Casillas al cuarenta cumpleaños de Carbonero. Allí, además, se encontró con la actual pareja de su ex, Nacho Taboada, con quien también mantiene un cierto vínculo desde hace un tiempo, algo que para ella era "muy importante".
El cariño que mantiene la expareja parece extenderse al contexto del portero con la familia de la periodista. En los últimos meses, la madre de Sara, Goyi Arévalo, ha sufrido un problema de salud. Un bache cuya confirmación en medios coincidió temporalmente con los mensajes que Carbonero compartió desde el hospital por dichas fechas, y que generaron una cierta preocupación.
El Español pudo confirmar entonces que era la periodista estaba ejerciendo de acompañante de su progenitora, muy arropada por Sara y su otra hija, Irene Carbonero. Y ahora, el mismo medio ha revelado que hay otra persona muy pendiente del estado de Goyi. Se trata de Iker, que, en palabras del digital, "sigue de cerca la evolución" de la abuela materna de sus hijos.