Los volúmenes buscan su inspiración en la sastrería inglesa de los años veinte, especialmente en los trajes de noche y gala, y en cuanto a las siluetas, en la sastrería napolitana de los 50. Los tejidos, vuelven a ser lanas y fieltros que combinan con la piel y pelo. Los fieltros toman referencias de los tejidos clásicos: espiga, raya diplomática, pata de gallo o jacquar y combinan entre ellos mediante superposiciones o cortes simples buscando la mezclas.