Un cumpleaños, fecha totalmente rutinaria para cualquier mortal, puede llegar a convertirse en el día perfecto para conocer un poco más a los vips. Sobre todo a aquellos que aún no han roto la barrera de la naturalidad en esta era de las redes sociales. Y dentro de este colectivo famosil están nombres como el de Ana Boyer. Acostumbrada a que las revistas sean la vía por la que hablar de su intimidad (lección que aprendió de su madre, Isabel Preysler, que aún ostenta el título de 'reina de corazones' por su constante presencia en las portadas del papel couché), la hermana menor de Tamara Falcó apenas se deja ver con espontaneidad en el universo Instagram.

Si repasamos su feed, a pesar de que la mayoría de sus publicaciones son de contenido personal, cada instantánea que comparte es de tal perfección que es difícil imaginarse cómo es su realidad más allá de los filtros de lo virtual. Sin embargo, este 18 de abril, la felicitación que le ha dedicado su chico, el tenista Fernando Verdasco, nos ha permitido saber cómo es en casa esta socialité que vive entre España y Dubai y que ya es madre de un niño al que puso de nombre Miguel.

En ella, su marido le ha querido felicitar por haber cumplido 33 años a su lado definiéndola como "la persona con la que más momentos increíbles e inolvidables he pasado en los últimos años". La pareja, que se conoció en 2012, inició su noviazgo un año después y contrajo matrimonio en 2017, ha ido marcando hitos vitales como dúo. El primero fue el hecho de que ella aceptase seguir el ritmo de vida de Verdasco, deportista de élite, y construirse una vida a caballo entre Madrid y Catar.

Luego llegó el momento de casarse. Pero sin duda alguna, el paso más trascendental que han dado como pareja ha sido convertirse en padres, algo que Fernando ha querido reivindicar en esta felicitación que ya acumula miles de likes. "Siempre has estado para apoyarme en los buenos y aún más en los malos momentos. Gracias por ser una mamá y una mujer tan increíble y darme la familia que tengo. Os quiero con todo mi corazón", ha escrito, incluyendo en esta dedicatoria al niño de tres años que tienen en común.

Uno de esos "malos momentos" a los que hace referencia Fernando Verdasco en esta carta abierta es la muerte del que fue su suegro, el político Miguel Boyer, cuando apenas llevaban un año de relación. En septiembre de 2014, el exministro socialista que fue, hasta el momento, el último marido de Isabel Preysler, fallecía a causa de una embolia pulmonar dos años después de sufrir una hemorragia cerebral de la que se estaba recuperando lentamente y que le había provocado serios problemas de movilidad. Esta tragedia familiar, en la que el tenista se volcó con Ana Boyer, fue algo que fortaleció su noviazgo hasta hoy.