Zayra Gutiérrez y su pareja, Miky Mejías, han bautizado a su hijo este fin de semana. El pequeño Hugo, que nació el 16 de abril, recibía el sacramento del bautismo en una iglesia de Madrid en una íntima ceremonia en la que su bisabuela (la madre de Arancha de Benito) y el abuelo paterno han ejercido de orgulloso padrinos. 

Para una día tan especial, los papas del homenajeado han huido de una gran celebración y han organizado una pequeña y sencilla fiesta a la que apenas han asistido un grupo de cincuenta personas, entre familiares y amigos. Sin embargo, ha sido una ausencia la que ha acaparado todos los comentarios y ha destacado por encima de todos los invitados, entre los que se encontraban Makoke y sus hijos Javier Tudela y Ana Matamoros. Guti, el padre de Zayra no ha asistido al bautizo de su primer nieto. 

Ni el futbolista, ni su mujer ni sus hijos pequeños se han dejado ver ni en la iglesia ni en la celebración posterior. Ante el revuelo ocasionado por esta sonada ausencia, ha sido la propia Zayra la que le ha restado importancia. "Mi padre no asistirá. Está en Girona, porque como juega el Madrid hoy... él es comentarista y entonces está allí. Romina no ha podido venir porque se queda con los peques, cuidándoles", ha dicho a las puertas de la iglesia. Unas palabras a la que se unía su hermano Aitor. "Sabíamos que la ausencia iba a ser muy sonada, pero está todo bien. El otro día estuvimos con él merendando y todo está bien. El lunes y martes comeremos con él y todo perfecto".

Horas más tarde, y viendo que todo los comentarios sobre el bautizo giraban en torno a esta ausencia, Zayra ha querido zanjar definitivamente la polémica y ha compartido a través de sus stories una imagen de su padre, Romina y sus hijos con el pequeño Hugo acompañada de un texto en el que ha dejado claro que la relación familiar es estupenda y que la ausencia de su familia paterna ha sido simplemente un problema de agendas. "Os amo mucho, me hubiese encantado que hubieseis estado y a vosotros estar conmigo, pero por trabajo no se ha podido. Esta semana tenemos nuestra celebración. Os amo familia".

Tras la celebración del bautismo, todos los invitados ponían rumbo a la casa de Arancha de Benito, lugar elegido por la pareja para hacer la celebración. En un jardín decorado a base de globos en tonos azules y con las mesas dispuestas alrededor de la piscina, familia y amigos han disfrutado de una fiesta en la que no ha faltado detalle. Un photocall para llevarse un recuerdo de este día, una preciosa tarta de fondant, un dj que ha amenizado toda la velada y al que ha sustituido la propia Zayra en un momento de la fiesta... Los cincuenta invitados lo han pasado en grande. 

Y por supuesto, no han faltado los regalos. El pequeño protagonista de la velada, que nació el 16 de abril en Madrid, ha recibido muchísimos presentes por parte de los cincuenta invitados que han querido celebrar con él este día tan especial. Sin embargo, uno ha destacado por encima de todos. El pequeño Hugo ya tiene su propio 'coche de alta gama' para hacer de las suyas en el jardín de su abuela. 

Y más allá de la celebración del bautizo y la ausencia de su padre, Zayra, que ha elegido para la ocasión un vestido largo de tirantes en tonos azules con estampado floral, ha sorprendido a la prensa con sus declaraciones sobre sus planes de futuro. Muy sincera, la hija de Arancha de Benito ha asegurado que tiene ganas de darse el 'sí, quiero' con el padre de su hijo. "Tengo muchas ganas de pasar por el altar, pero también depende de Miki", ha dicho Zayra, qué también ha manifestado su deseo de ampliar la familia. "Dentro de dos o tres años me gustaría tener otro hijo, ahora no me quiero meter en un embarazo", ha dicho la joven.