Isabel Preysler sigue una estricta rutina cada mañana con su desayuno: varias bebidas y sin interrupciones familiares

Isabel Presyler siempre ha presumido de estar en plena forma física. La reina de corazones sigue una estricta rutina de alimentación, uno de sus secretos de belleza. Si hace unos años desvelaba el zumo detox que tomaba cada día y que forma parte de su dieta, ahora la madre de Tamara Falcó ha abierto las puertas de su casa (en el documental que protagoniza) en donde ha compartido lo que desayuna cada día.

Para Preysler, la primera comida del día es un momento sagrado. De hecho, en la docuserie que ha grabado sobre su vida, la expareja de Julio Iglesias ha confesado que le molesta mucho cuando le hablan por las mañanas y que es algo que sus hijas, en numerosas ocasiones, no respetan. Digamos que Isabel no es una morning person. En bata y recién despierta, ha compartido los alimentos que no pueden faltar en su bandeja a esta hora del día.

La reina de corazones incluye hasta tres tipos de bebidas en su menú: agua caliente con lima (que ayuda a la pérdida de peso y a depurar el estomago); zumo de pomelo (que es antioxidante y mejora la visión) y agua de jamaica (que estimula la digestión y controla la presión arterial).

En cuanto a alimentos sólidos, Preysler opta por tres alimentos: pomelo (que contiene vitamina C y que ayuda a disminuir el colesterol); kiwi (que reduce la sensación de fatiga y combate el estreñimiento) y semillas de lino (que es una grasa sana, que contienen hierro y que tienen un alto contenido en fibra).

No es la primera vez que la reina de corazones nos desvela sus trucos de belleza. Trucos de lo más socorridos y al alcance de todos, como su mítico batido detox que se compone del zumo de 4 limas, dos rodajas de manzana, medio pepino, medio pimiento verde, una rodaja de calabacín, un puñado de espinacas, 4 o 5 flores de brócoli y dos hojas de kale. Un chute de vitaminas y antioxidantes que ayuda a purificar el organismo.

Sin embargo, hay un alimento que es toda una perdición para Preysler, tal y como ha confesado su hija, Tamara Falcó: el chocolate. "Acabamos de volver las dos de un viaje a Maldivas y se llevó seis tabletas para cinco días", desveló la empresaria sobre la mayor perdición de su madre.