La carrera profesional de Alba Díaz Martín ha crecido exponencialmente desde que trabaja de la mano de Papaya Comunicación. Desde que se sumara a esta agencia de influencers y representación, rara es la semana en la que la hija de Vicky y El Cordobés no viaja por motivos laborales. Si hay algo de lo que presumen estos creadores de contenidos (y algo que ven positivo en su profesión), es por las oportunidades que les dan las marcas para conocer diferentes partes del mundo. Aunque, como ha contado la primogénita del diestro retirado, no todo es color de rosas.
Si por algo se caracteriza Díaz es por su espontaneidad frente a la cámara. Su naturalidad conquista cada día a sus más de trescientos setenta mil seguidores. Es por ello que a la hora de hablar de la cara B de su profesión, tampoco tiene filtros: "Me gusta mostrarme tal y como soy. Es verdad que cuando estoy muy bien, soy muy segura de mí misma y estoy fuerte, pero obviamente tengo mil cosas de solucionar, nunca dejamos de aprender".
Concretamente, la joven ha desvelado que, cada vez que tiene que viajar por motivos laborales, a veces se siente "sola" y "vacía" por la ausencia de sus personas más cercanas, aunque actualmente se encuentra "muy feliz" y "agradecida" a las marcas que quieren colaborar con ella, que cada vez son más. ¿El secreto? Su mantra de "vivir el presente a tope".
Sin embargo, en estas mismas escapadas profesionales, ha relatado que no es ella al cien por cien y que todavía no entiende porque tiene esa mezcla de emociones: "Cuando voy en el avión o estoy sola durmiendo, hay un popurrí de energías... Y yo las siento todas, entonces no pego ojo. Luego ya me entra la taquicardia. Viajar sin nadie, gente que considero extensiones de mí, me cuesta mucho. No lo paso bien del todo. No sé por qué será, si lo he heredado genéticamente".
"Es como si me quedara vacía, porque no se si llegó a tener esa seguridad al cien por cien en mí. Si no que tengo un setenta y el resto lo tiene la gente en la que confío. No sé si está bien o mal, pero es lo que he estado haciendo", ha continuado explicando. "Por esa misma razón, cuando viajo, siempre me faltan como mini porcentajes de seguridad. He estado dos horas taquicárdica perdida, pero bueno cada uno tiene sus inseguridades y sus miedos, sus fobias...", ha dicho.
Pero, ¿de qué manera le repercute esto a Alba? La joven ha desvelado los síntomas que padece cuando tiene esa sensación de 'soledad': "Me cuesta sentirme al cien por cien cuando estoy lejos de gente que es mi base segura. Me mareo, me va el pulso muy rápido, me da un poco de ansiedad. Hay una parte de mí que se queda vacía. Serán vivencias también que me han hecho sentir miedo cuando estoy "sola". Un llantito tonto, conversaciones conmigo misma en el espejo y a dormir".