Daniel Sancho habla desde prisión antes de conocer la sentencia: "Quedó claro que fue un accidente"

El próximo jueves 29 de agosto por fin podremos conocer la resolución de la sentencia del juicio contra Daniel Sancho. Un año después de que él mismo se declarase culpable del asesinato del colombiano Edwin Arrieta, el hijo de Rodolfo Sancho ha concedido unas declaraciones a la agencia EFE en las que cuenta cómo se encuentra.

Daniel asegura estar "preparado para lo mejor y para la peor" y, según el medio citado, se encuentra "optimista" y "convencido" de que el juez va a descartar que la muerte de Arrieta fuese un asesinato premeditado. El español considera que durante el juicio "quedó claro que fue un accidente", en referencia a la muerte del cirujano, y citó las pruebas presentadas por la defensa que, según él, demostrarían que la muerte fue culpa de una pelea.

Según explican en el medio citado, estas declaraciones se realizaron el pasado 22 de agosto durante una visita a la cárcel de Tailandia en la que se encuentra. La conversación se produjo a través de un cristal y un teléfono, sin que se pudieran grabar ni tomar notas. Daniel admite también que está viviendo con impaciencia la espera de la resolución y que estos meses desde la celebración del juicio, que terminó el pasado mes de mayo, se le han hecho "muy largos". "Hasta el juicio era un hombre con una misión", comentó, explicando que pasó mucho tiempo centrado y preparándose para el proceso en el que tuvo un papel activo y pudo hacer preguntas a los testigos.

El pasado sábado Rodolfo Sancho fue fotografiado en el aeropuerto de Madrid, junto a su equipo, para poner rumbo a Tailandia. Según adelantó la revista LECTURAS, en la resolución de la sentencia el juez solo podrá estar acompañado por sus padres, Rodolfo y Silvia Bronchalo.

En unas declaraciones a los compañeros de Europa Press, Rodrigo, el hermano del actor y tío de Daniel, comentó que la defensa de su sobrino está "esperanzada" y confían en que la decisión del juez no sea "lo más grave". Recordemos que este tipo de delitos, en Tailandia, podría ser condenado a cadena perpetua o incluso a muerte. "La idea es que pueda volver a España, en eso está la esperanza. Así su abuela podrá estar más cerca de él", dijo ante las cámaras de los compañeros de Europa Press.