A finales de 2024, Pilar Rubio y Sergio Ramos nos sorprendieron con la noticia de que ampliaban la familia. La presentadora y el futbolista no se referían a que iban a tener un nuevo bebé que se iba a convertir en el hermano pequeño de Sergio Jr., Marco, Alejandro y Máximo Adriano, si no que lo que querían comunicar es que tenían “dos nuevos bebés”, pero se referían a dos nuevos cachorros de la raza bodeguero.

La pareja compartió la feliz noticia tumbados desde la cama y, a juzgar por sus caras, estaban recién levantados. Pilar y Ramos mostraron a uno de los pequeños explicando que se portaba “muy bien” y que se pasaba toda la noche acurrucado junto a ella.

Ahora que han pasado unos meses desde que dieron la noticia, Pilar Rubio ha querido mostrar a sus más de once millones de seguidores en Instagram cómo han crecido sus “bebés” porque según ella “están para comérselos”. Sin embargo, cuando la modelo ha abierto la puerta de la habitación en la que estaban los dos nuevos integrantes de su familia y les ha dado su correspondiente saludo, ha descubierto que habían hecho una trastada digna de los perros cuando aún no han alcanzado la madurez.

Los dos cachorros de Pilar Rubio y Sergio Ramos habían estado jugando con las cortinas de la sala en la que estaban y se habían dedicado a morderlas, lo que hizo que sufrieran un pequeño percance. “¿Quién ha hecho eso? La madre que los parió. Se han cargado la cortina”, decía sorprendida la colaboradora. Los perros, al darse cuenta de que su dueña les había descubierto, decidieron huir de su lado. “No, no te vayas, ven aquí. ¿Ahora qué hacemos? Es que eso no se hace, mi amor”, regañaba Pilar a sus perros.

“El vídeo era para que los vierais como habían crecido, vamos a tener que cambiarlo porque voy a tener que arreglar la cortina”, explicaba la mujer del futbolista. Y como para la mayoría de los problemas sí que hay una solución, ‘Pili Costurera’ – como ella misma se ha llamado - se ha puesto manos a la obra con su máquina de escribir. “Si esto lo coso directamente puede ser que se me vaya a deshilachar, así que le voy a poner un poco de Friselina, que es como una tira que se pega”, explicaba Pilar mientras mostraba a cámara cómo iba a arreglar las cortinas.  

Aunque a medida que iba cosiendo se iba dando cuenta de lo bien que se lo habían pasado sus cachorros con las telas: “La cortina ha quedado hecha un desastre porque es que veo que le han metido bocados por todos lados, pero bueno”.

Finalmente, Pilar ha conseguido su objetivo y lo ha mostrado orgullosa: “Me quedan unos cuantos remates, pero por lo menos ya no está en el suelo. Y hasta aquí un arreglo de emergencia”, señalaba la presentadora que daba así por finalizado su trabajo.

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