Mario Vaquerizo ha regresado a Cáceres después de la aparatosa caída que sufrió en el mismo lugar durante uno de sus conciertos con ‘Nancys Rubias’ y que terminó llevándole al hospital. Allí, el televisivo ha recordado las consecuencias que tuvo en su salud el instante que se produjo solo dos meses antes de que su mujer, Alaska, se dejase ver con un parche en el ojo izquierdo en ‘TardeAR’ por un trombo en la vena central de la retina y un edema sobre los que también se ha pronunciado ahora el artista.

Este lunes, 7 de abril, Mario ha vuelto a Cáceres, esta vez por un motivo muy especial: para recoger el Premio a la Excelencia Picota del Jerte 2025 con el que ha sido galardonado en un acto que ha reconocido su "autenticidad, calidad y excepcionalidad", mismos factores que comparte con la Picota del Jerte según destaca su organización.

Allí, ante los micrófonos de Europa Press, el de ‘Nancys Rubias’ ha hablado sobre su recuperación de la afección sufrida tras su caída, la cual le hizo perder la visión de un ojo a causa de una retinopatía de Purtscher y que se asocia con traumatismos craneoencefálicos: "El ojo ya estoy recuperado. A ver, hay una parte del ojo que ya no se va a recuperar, que afectó a la mácula. Entonces son como tres píxeles donde ahí no hay visión”, ha comenzado explicando.

Sin embargo, él mismo ha recalcado que es “una nueva visión” y a pesar de no ver “como antes”, ha agradecido poder hacerlo: “Ten en cuenta que yo tenía menos de un 5% de visión en la vista y ahora tengo un 93. Oye, pues vamos a aplaudir. Vamos a dar gracias a Dios", ha confesado.

A pesar de las palabras con las que ha tranquilizado acerca de su estado de salud, Vaquerizo se ha sincerado sobre la preocupación que sí que mantiene respecto al de su mujer por el trombo que padece: “Fíjate, lo de Olvido me preocupa más. Porque yo, por ejemplo, justifico más mí no visión porque es la caída pero que tú estés en tu casa y que de repente dejes de ver es algo muy así…”, ha expresado.

Tras sus primeras palabras relacionadas con la dolencia de Alaska, ha resaltado la manera que tiene su compañera de vida de afrontar los baches y en concreto el mencionado: “Olvido lo pasó muy mal y es una persona que se lo traga mucho, entonces el susto, que yo lo estoy contando aquí, que tengo una forma de contarlo, pero fue muy heavy. Estamos los dos en casa que no vemos nada", ha concluido.

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