A todos nos ha pasado. Estás de viaje secreto con tu churri, vas a cenar a casa de una celebrity que te saca una foto con el móvil… y a la mañana siguiente su medio millón de mejores amigos del Facebook Y un montón de pobres paparazzies sin trabajo tirándose de los pelos por la maldita manía de los famosos de actuar a veces como seres corrientes.
Eva Longoria ha ayudado a hacer un poco menos íntimas las vacaciones americanas de Íker Casillas y Sara Carbonero subiendo esta mañana (para ella, la pasada noche) a su página de Facebook y a su Twitter las fotos de la cena que celebró en su casa de Los Ángeles y a la que también asistieron su amigo Alejandro Sanz con su novia Raquel Pereda, Eduardo Cruz (hermano de Penélope) y María Bravo, la ex novia de Bruce Willis que últimamente se ha hecho más conocida gracias a su participación en el reality Casadas con Hollywood. De siete invitados famosos, tres han comentado la cena en las redes sociales. La imagen misma de la discrección.
A primera vista, el grupo parece de lo más extravagante, casi como una pandilla de Erasmus de los que sólo tienen en común el idioma y el hecho de estar fuera de casa. Pero todo tiene su explicación. Longoria y Casillas comparten a Alejandro Sanz como nexo común. Bravo y Longoria son amigas, como pudimos ver en algún momento mítico de Casadas con Hollywood. Eduardo Cruz y Sanz comparten su condición de músicos, incluso uno teloneó al otro en una gira por las Américas.
Y aunque en las fotos no queda muy claro quién es más famoso ni quién es más fan de quién, parece que lo pasaron bien. "Great dinner at my house with the crazy Spaniards @alejandrosanz dice la actriz mezclando inglés y español.
Si Casillas y Carbonero querían intimidad en su escapada, han tenido la mala suerte de ir a parar con dos de los mayores twitteros latinos, Longoria y Alejandro Sanz. Entre los dos suman más de un millón de seguidores sólo en Twitter, así que cualquier foto que aparezca en sus cuentas se propaga a la velocidad de la luz. Ambos son conscientes de la importancia de las redes sociales para sus carreras y cuidan la relación con sus fans a través de Internet. De hecho, Sanz pidió el año pasado a sus amigos Casillas y Longoria que le ayudaran en la promoción de su disco 'Looking for Paradise' en las redes sociales. María Bravo también mantiene Facebook y Twitter, pero en la escala de "famosos 2.0" se encuentra bastantes escalones por debajo.
Aunque los amigos de Casillas sean grandes twitteros, no llegaron al punto de retransmitirnos en directo de qué habló la pandilla durante su encuentro o de contarnos qué cenaron. Quizá Longoria aconsejó a Carbonero qué hacer cuando tu pareja es un deportista de élite. O quizá trataron de un tema mucho más interesante: cómo llevar una sudadera de esas grises con letras con dignidad femenina. Nunca lo sabremos.
De momento, las cuatro instantáneas se han extendido como la pólvora por la red. En la primera unos sonrientes Longoria, Sanz y Raquel se abrazan mirando a la cámara. En la segunda, la actriz estadounidense se retrata con Casillas. En la tercera posan las dos parejas con la anfitriona. Y en la cuarta y última, subida por Bravo, aparece todo el grupo excepto Casillas.
Tras verlas en detalle una se queda con la sensación de que Longoria y Bravo se han comportado como haríamos cualquiera en una cena así: subiendo a internet justo la foto en las que más guapas salimos y menos favorecida esa chica nueva que es mucho más mona que nosotras y que además tiene por novio al portero más deseado del mundo. Qué consuelo saber que también son humanos y que tienen la mano tan ligera como los demás a la hora de cargarse secretos a lo grande y vía Facebook. La verdad es que con amigos así, ¿quién necesita paparazzies?