La marcha de Kate Moss de Topshop es la comidilla de la prensa de moda de los últimos días. En los últimos tres años la modelo realizó trece colecciones para el gigante textil británico, la primera de las cuales provocó colas de horas ante las tiendas y contenía prendas que se agotaron en un tiempo récord de 15 minutos. El resto, con piezas que costaban de 65 a 400 libras, se vendieron en cuestión de horas.
En plena recesión, jóvenes de todo el mundo se llevaban los vestidos de Moss (que ella misma se ponía, haciendo una de las mejores promociones que se recuerdan en el mundo del marketing) como si los regalasen. A cambio, la modelo se agenció tres millones de libras.
Pero hace tres días se anunciaba que Moss no volvería a diseñar nada para la marca tras la presentación de su última colección, la número catorce, este octubre. Entonces se dijo que la salida de Moss era amigable y que ella y el propietario de Topshop, Sir Philip Green, estaban de acuerdo en que el exceso de trabajo de la modelo le impedía continuar con su labor.
Sin embargo, los rumores ya han empezado a extenderse. Según se cuenta, la mala relación entre Sir Richard Green y Kate Moss habría sido la causa del abandono. El propio Green ya se ha apresurado a desmentir cualquier tipo de disputa. "No ha habido dramas y no necesitamos una nueva musa. Sólo existe una Kate Moss y no necesitamos ninguna sustituta".
Según otros comentarios, estos publicados por el diario Sunday Times, "la colección de Kate Moss ya no se vendía tan bien como al principio y corría peligro de empezar a saturar". Kate hizo en 2008 y 2009 seis colecciones anuales, pero en 2010 bajó a únicamente dos. Según la fuente de Sunday Times, "ya no podían mantenerlas".
El rumor más sabroso es, en realidad, ese que dice que Kate Moss se fue debido a que la hija de Sir Richard Green, Chloe, de 19 años, ha empezado a trabajar como diseñadora en la empresa y va a comenzar su propia colección. Esto hubiese causado el malestar de Kate, a la que Sir Richard siempre se refirió como "mi segunda hija". Sea cual fuese la causa, estamos seguros de que Kate Moss encontrará una excusa para celebrarla por todo lo alto.