Que la carrera cinematográfica de LiLo pasa por horas bajas no es ningún secreto.
Mientras que Amanda Seyfried (que fue compañera suya en "Chicas Malas") no para de protagonizar blockbuster tras blockbuster ("Mamma Mía", "Querido John" y ahora "Letters to Juliet") y de hacer los papeles que en un principio deberían ser para ella, La Lohan se tiene que conformar con tratar de robarle el novio a La Seyfried en Cannes, arrastrándose cual víbora.
Y como no la sobran las ofertas precisamente, pues ha decidido diversificar negocio. Ahora la protagonista de "Herbie a tope" ha comenzado a ganar dinero anunciado páginas web desde su prostituido Twitter (@lindsaylohan)
Ella lo vale, que para algo tiene 600.000 seguidores.
Tratar de hacer dinero con el Twitter tiene algo de sonrojante e incluso de pueril, especialmente cuando esa persona que trata de hacer dinero es una celebrity en decadencia profesional.
Por eso, desde Divinity, le deseo a Lindsay Lohan, ese juguete roto del Hollywood más cruel, mucha suerte con su vuelta al rubio así como con su nuevo personaje de "Inferno", película en la que interpretará a Linda Lovelace, mítica protagonista de "Garganta profunda". Ojalá la den un Oscar y, de entrada, ojalá pueda rodarla, si las autoridades se lo permiten y no la envían a la cárcel por no presentarse en los juzgados a su debido tiempo.
Y a ver cuando me proponen a mi poner anuncios en mi Twitter...