Malena Costa: "Soy muy feliz. He conseguido todo lo que quería"
Malena Costa es feliz. La sonrisa que luce de oreja a oreja la delata. Ella tampoco tiene problema en decirlo. Una, dos y hasta en tres ocasiones. La modelo de 21 años lo repite cada vez que tiene oportunidad. Y no es para menos. Su carrera profesional va viento en popa y su vida personal también. Hace varios meses que Malena mantiene una relación con Carles Puyol, el defensa del Barça y titular de la Selección. Ni una ni otro lo ocultan y hace poco los vimos llegar de Zúrich donde fue testigo de la Gala del Balón de Oro de la FIFA: "Fue una experiencia muy bonita. Creo que mucha gente querría estar y yo tuve la oportunidad. Estoy muy agradecida".
Quedamos con la modelo una tarde de febrero. Llega directa de una sesión de fotos con El Corte Inglés, para el que pondrá su imagen en una campaña que está al caer. Cuando entra por la puerta llama la atención. Los tacones realzan sus 176 centímetros de altura. "Nunca voy de plano", nos cuenta. Malena se siente mucho más cómoda en las alturas que con chanclas. Y hablando de comodidad saca a relucir los vaqueros, una prenda que ha pasado a sustituir en su armario a faldas y vestidos. “Antes no me acababa de ver con ellos”, explica la mallorquina de madre sueca. Dice que de los Sjögren –su segundo apellido- no ha heredado ni el rubio ni lo ojos azules. “Lo que sí creo es que mis rasgos no son totalmente españoles”, explica.
Han pasado cinco años desde que Malena Costa salió de Supermodelo, el concurso que la dio a conocer cuando sólo tenía 16, y desde entonces su currículo no ha parado de crecer. Imagen de Don Algodón y Palmolive (el anuncio aún no se ha estrenado en España aunque ya se puede ver en países como Holanda), a Malena la vimos también recientemente vestida de blanco para Pronovias. Fue la madrina del acto de presentación de la colección primavera verano de la marca. Dice que no le impone este atuendo: “Como aún no tengo esas ideas por la cabeza…”. “Es como si me pones un vestido largo de noche que parece de alfombra roja. Es lo mismo”, dice muy segura. De momento no hay boda a la vista.
Sobre su paso por el concurso lo tiene claro: “Estoy muy feliz de haber participado porque me dio mucha experiencia, no sólo como modelo sino porque allí maduré mucho”. Cuando entró en Supermodelo, donde quedó sexta, Malena tenía 16 años y cumplió allí los 17: “Me fui a Madrid, pasé mucho tiempo sin mis padres y maduré mucho y muy rápido. Fue allí donde pude decidir lo que quería hacer”.
Malena iba para veterinaria. Fue su sueño de infancia hasta que se cruzaron las pasarelas en su camino. Ahora está encantada con su decisión: “Lo que me gusta de mi trabajo es que hago de todo. Cada día hay un grupo diferente de gente, un equipo diferente, unas fotos diferentes… No me gusta hacer siempre lo mismo en mi vida, me gusta ir cambiando”.
Su cambio profesional no cambió sus gustos y los animales siguen siendo su principal pasión. Desde que vive en Barcelona, ciudad a la que se ha adaptado perfectamente y en la que se siente “muy cómoda”, no puede tener perros, pero se quita la espinita yendo como voluntaria a una protectora de animales cada vez que puede. “Para llenarme un poquito voy a pasear perros. Así al menos estoy feliz y estoy ayudando”.
Cuando habla de esta faceta Malena saca su lado más tierno y hasta luce con orgullo el moratón que tiene en una pierna fruto de una mordedura. “Yo por mí iría cada día porque me gusta mucho”, añade la modelo que lleva un mes metida en esta aventura.
Malena ha dejado a sus dos mascotas en Mallorca, donde sus padres se encargan de cuidarlas: “Una boxer muy guapa de color blanco, se llama Llisa, y un perrito que se llama Tigre, tiene 16 años. O sea, lleva toda la vida conmigo. Cuando era pequeña tenía toda la casa llena de animales, parecía el arca de Noe. Ahora que no estoy no puedo tener tanto, tengo dos perritos que los quiero mucho y espero poder tener uno en un futuro”, insiste.
A los perros de Malena los pudimos ver hace poco en Twitter. Los presentó a todos sus followers durante uno de sus viajes a Mallorca. Y es que Malena es una tuitera activa. Desde hace cuatro meses cuida cada día su cuenta personal: @malenacosta7. Dice que al principio no le veía la gracia pero ahora le encanta. Si el Facebook lo define “para los amigos”, el Twitter es para la gente que le gusta su trabajo.
“Es muy útil para desmentir cosas”, por ejemplo. También para hacerlas públicas. En la red social Malena no oculta su relación con Puyol y cuando sale a relucir la foto del cumpleaños de Piqué - Malena es una de las ocho personas que acompaña a la pareja en la fiesta- asegura que el futbolista hizo muy bien en sacarla de esa manera. Además, cuenta que fue ella quien animó a Beatriz Matallana, la pelirroja de la famosa foto, a hacerse una cuenta en Twitter, donde arrasó junto a #eldeloscuadros.
Entre las imágenes que suele subir Malena están las de su colección personal de relojes CP5, la marca de Carles Puyol. Las tuitea “con orgullo” y cuando posa ante la cámara del fotógrafo lo enseña bien. “Que se vea”, dice. La campaña gratuita esta hecha pero si le preguntas por la posibilidad de posar para la marca no lo tiene claro: "No se sabe. En un futuro igual sí. No sé", dice.
Sus ratos libres los pasa haciendo “lo que todo el mundo”. “Soy sencilla me gustan las cosas normales. El deporte es una cosa que me gusta mucho, todo tipo de deportes…” Le gusta ir al gimnasio, practica Bikram yoga (yoga en una sauna a 40 grados) y también se siente cómoda como espectadora. Desde la grada del Nou Camp, Malena pudo ver la dedicatoria del gol que Puyol le hizo en el Nou Camp dejando a todo el mundo claro su relación. Además en su Twitter ha publicado varias de las imágenes que ella misma en la grada del estadio culé.
A Malena le gusta la comida sana aunque confiesa que también cae en la tentación: “Cuando me apetece me como el chocolate que quiero o guarradas. Yo me doy el gusto y cuando quiero como lo que quiero, pero a diario intento comer bien porque me sienta mejor”. Si alguien le dice que las modelos no comen de todo, Malena lo niega rotundo.
La playa es otra de sus pasiones, igual que las compras. Le encantan. Pero si le preguntas por lo que más le gusta hacer, la respuesta es la equitación y el dibujo. “Ahora no dibujo tanto pero cuando era pequeña me pasaba el día dibujando y escribiendo en un diario… Ahora sigo escribiendo”, explica. Malena se confiesa “muy nerviosa” y define el dibujo y la equitación como su principal terapia.
Malena mira el futuro con ilusión. El próximo día 21 veremos su próximo trabajo. La modelo es la chica de diciembre del Calendario Larios 2011. Repite una experiencia que ya vivió en 2009 y que era una aspiración en sus comienzos. “La verdad que es un orgullo haber llegado a conseguirla”, cuenta
Esta vez el calendario es diferente: “Son pequeños cortos y la verdad que me ha encantado hacerlo porque a mí me gusta mucho hacer anuncios de televisión”. Malena se siente “muy cómoda” grabando spots como el de Don Algodón, donde vemos una Malena muy natural: “Es como muy fresco y yo soy bastante así, como salgo en el anuncio”.
A Malena no le imponen las cámaras y la interpretación entra en sus planes de futuro: “Me apunté a una escuela cuando estaba en Madrid y estuve como un mes, lo que pasa que justo un mes después me empezaron a salir trabajos y lo tuve que dejar. La verdad es que una cosa que no descarto”.
También entra en sus planes trabajar en el extranjero, aunque de momento no le falta el trabajo en España. “Por ahora tengo pensado quedarme aquí pero en me gustaría probar suerte en Nueva York ya que en Miami me fue muy bien”. La ilusión no le falta y es tajante: “Yo espero que todo me siga yendo como me va ahora. He terminado el año diciendo soy muy feliz, he conseguido todo lo que he querido hasta ahora y espero seguir”.