Un coco en una isla paradisíaca, una inocente galletita, un partido de basket entre colegotas… o una alfombra. Una carísima e inoportuna alfombra. El último accidente ‘tontorrón’ que agua la fiesta durante un tiempo a un famoso tiene a la recién casada Cayetana como protagonista, después de que una parte de la flota de alfombras persas del sevillano Palacio de Dueñas se interpusiese en su camino justo cuando se dirigía a la presentación de su biografía, ‘Yo, Cayetana’ (Espasa), provocándole “una fisura en la pelvis”.Repasamos otros curiosos accidentes de famosos.
Todos esperaban en el Alcázar de Sevilla a la Duquesa. Hablaría por primera vez después de su boda y se esperaban jugosos detalles biográficos en la presentación de su ansiado libro, "Yo, Cayetana" (Espasa), pero la esposa de Alfonso Díez nunca llegó: una alfombra le hizo perder el equilibrio esa misma mañana en el Palacio de Dueñas, provocándola "una fisura en la pelvis" que dio con su huesos en el hospital. No pocas bromas recorren la web a estas horas. Ana Rosa Semprún, directora general de Espasa, fue la encargada de informar del accidente a decenas de reporteros del acto el de presentación, aplazado hasta nueva orden. Los médicos le han pedido reposo absoluto,de modo que las escapaditas con Alfonso también deberán posponerse. El volumen ya está en las librerías.
La exmodelo Jill Marshall demandó a Javier Bardem en 2005 por haberle roto la nariz por accidente mientras bailaban en un club nocturno de Nueva York, durante la fiesta posterior al estreno de ‘Mar adentro’. Era la primera vez que el entonces-aún-no marido de Penélope Cruz pisaba suelo Holliwoodiense, al menos en serio. Cierto es que él no sufrió las consecuencias directas del accidente, pero la etílica noche trajo retranca en los medios durante semanas. Al parecer una cosa llevó a la otra y la celebración subió varios enteros, hasta que la nariz de Marshall frenó en seco uno de los movimientos rítmicos en pista del prota de ‘Huevos de oro’. El abogado del actor, Martin Singer, negó posteriormente cualquier responsabilidad de su cliente. "Él es un excelente bailarín.No voy a comentar las habilidades de baile de esta mujer", dijo Singer.
El vocalista del grupo de rock estadounidense Aerosmith fue hospitalizado en Asunción, Paraguay, tras resbalarse con el jabón en la bañera del hotel. ¿Resultado? Un corte en la ceja, heridas en la boca y rotura de dos dientes. El concierto de la capital paraguaya quedó suspendido.
Hace cinco años, un coco se hizo famoso en el mundo entero gracias al gran guitarrista de los Rolling Stones, Keith Richards, de 62 años entonces. El mítico músico visitó las paradisíacas playas de Fiji, disfrutó de sus cócteles, trepó palmeras, reflexionó sobre el rock&roll mirando atardeceres y acudió a las urgencias hospitalarias después de sufrir una "ligera conmoción" por el impacto certero de un coco en caída libre. Otras fuentes indicaron sin embargo que la conmoción se produjo al caer él mismo de la palmera al suelo en mitad de una juerga,pero ya era tarde: el coco se había hecho fuerte en los titulares de medio mundo.
En enero de 2002, George W. Bush compareció en rueda de prensa con un moratón en su mejilla izquierda. Las cámaras captaron el misterioso golpe y lo retrasmitieron en tiempo real alrededor del planeta, con diferentes interpretaciones del mismo hecho según los continentes. El propio presidente relató su versión al cabo de unos minutos: había estado a punto de morir asfixiado al atragantarse con un 'pretzel' (galletita) mientras veía un partido de fútbol americano entre Miami y Baltimore. Sus perros, Barney y Spot, fueron testigos de cómo perdió el conocimiento durante unos segundos. La película ‘W’ de Oliver Stone recoge el ‘incidente presidencial’ con todo detalle.
Era el puente de Acción de Gracias. Barack se había dejado a Obama en casa y disfrutaba de un anónimo partido de basket con sus guardaespaldas y miembros de su gabinete. El sol lucía. Reggie Love, su asistente personal, intentó una finta en el área y acabó con su codo en el labio presidencial. "Tras ser golpeado de forma inadvertida en el labio por el codo de un jugador contrario mientras jugaba al baloncesto con amigos y familiares, el presidente recibió 12 puntos de sutura que le fueron aplicados en la sala de curas de la planta baja de la Casa Blanca", comunicó a la prensa Robert Gibbs, portavoz de la Casa Blanca. La razón para tanta puntada estuvo en el hilo utilizado, más fino de lo habitual para dejar menos cicatriz.
En el año del quinto centenario del descubrimiento de América, el rey Juan Carlos pasó la Nochevieja en la clínica Puerta de Hierro de Madrid, donde fue operado en la rodilla derecha. Unos días antes sufrió un encontronazo mientras esquiaba en la estación leridana de Baqueira-Beret."El accidente no fue imprudencia mía, sino mala pata del otro esquiador. El otro ni se dio cuenta de que era yo", declaró entonces el monarca a Onda Cero.