Algunas (14) pelis buenas para el verano (cargar en la maleta)
Algunas personas, como yo, no pueden pasar un verano entero sin ver una buena peli. Sin esa desconexión pacífica y legal que es una pantalla encendida con horas de trabajo y entrega centrifugadas, exprimidas y editadas para mi disfrute más o menos atento o superficial. Los amigos, la familia, las sobremesas y los gin&tonics molan. Pero a veces sólo quiero callarlo todo y darle al play.
La que sigue es una lista de pelis cojonudas, fáciles de conseguir (tienen uno o dos años) y que quizás no hayas visto porque no hicieron demasiado ruido en su momento...
-Mis días felices (Dir. Marion Vernoux). Es perfecta para ver con tu madre. Debería ser un género: pelis para ver con mamá. Fanny Ardant es la protagonista, de la edad de mi madre más o menos. Y está tan tremenda y tan explosiva y tan de tener buen sexo que vale la pena sólo por ella. Acercamiento generacional asegurado.
-Begin Again (Dir: John Corney). Comedia romántica indie. Normalmente no me gustan, porque los hipsters no respetan la tradición de un género que NO es menor. Pero ésta es distinta. La protagoniza Keira Knightley y eso ya es un motivo en sí mismo. (Es el monumento al tipo de mujer que me gustaría ser y no soy: frágil y terrible). La peli es independiente y sencilla. No sabe muy bien qué quiere ser pero, por otro lado, nadie lo sabe. Para matrimonios de treinta y tantos o cuarenta y que quieren más.
-Frank. (Dir: Lenny Abrahamson). Maravillosa, mágica y rara. Es plan para ver con amigos y algo para fumar. Michael Fassbender hace una interpretación colosal con su cabeza metida dentro de una cabeza de cartón. Así, sin manos. Una locura musical con discurso sobre la creación y la locura y lo mucho que se gustan.
-Magia a la luz de la luna (Dir: Woody Allen). Si dejaste de ver la última de Allen porque el hombre está que derrapa en dos de tres: ¡te equivocaste! Ésta es de las buenas. Es como si la hubiera escrito con 44. Y la protagoniza Colin Firth (el hombre con quien quiero acostarme desde hace más tiempo).
-No se aceptan devoluciones (Dir: Eugenio Derbez). Una genialidad, sin más. Al principio parece un surrealismo raro a lo 'Dos colgaos muy fumaos'. Pero no. En realidad es una película kafkiana (entendiendo que Kafka era un tío con un sentido del humor de aúpa, que iba en moto y jugaba al tenis: las tres afirmaciones son biográficamente ciertas). No la juzgues si no la ves hasta el final. Se puede ver con niños de a partir de siete, igual que se puede leer la Metamorfosis. Apuesta segura.
-La teoría del todo (Dir: James Marsh). Es el biopic de Stephen Hawking y es normal que hayas pasado de verla por la pereza que dan ambos asuntos: la física y biopics, aparte de la sillita de ruedas y todo lo demás… Error. Es una pedazo de película. Exquisita. Y me atrevo a decir que Hawking ni siquiera es el protagonista.
-Hombres, mujeres y niños (Dir: Jason Raitmer). Es del director de Juno y Up in the air. A mí me llegaron las dos. En este caso creo que baja un poco porque se mete en el mundo de las Redes Sociales y la soledad y es un tema del que es difícil salir indemne del tópico. Protagonizan Adma Sandler y Jennifer Garner. Se ve bien.
-Wild. (Dir: Jean-Marc Vallée). Para mí es una obra maestra. O lo que es lo mismo: hay un puto genio detrás de esta peli y puedes sentirlo y verlo venir. Me encanta encontrarme con genios en el salón, es así, aún cuando se equivocan, que no es el caso. Su director es el mismo que el de Dallas Buyers Club (seis nominaciones a los Oscars). Las dos son buenísimas. Wild, de la que hablamos ahora, es muy especial. Es íntima y es dura y es diferente. La protagoniza una mujer, Reese Witherspoon y carga con un peso narrativo sobre los hombros que no recuerdo haber visto antes. Es tan perfecto que lleva una mochila durante toda la peli, para que nadie se olvide.
-Al encuentro de Mr. Banks (Dir: John Lee Hancock). Si la ves como un biopic de la escritora P.L. Travers (autora de Mary Poppins) a lo mejor te da pereza. Pero no. Trata del encuentro entre la cultura popular, barata, mágica y masiva (Walt Disney) y la cultura rigurosa, exigente y creadora del libro (Mary Poppins). Y de cómo el señor Disney (interpretado por Tom Hanks) tiene que conseguir que la estiradísima escritora australiana de modales ingleses (P.L. Travers, interepretada por Emma Thomson) se “venda” a Disney. Aunque está basada en hechos reales no es fiel a la realidad, pero no le hace falta. Porque no quiere contar la vida de la escritora sino el conflicto, mucho más interesante, que su vida representó.
-Siempre Alice (Dir: Richard Glatzer y Wash Westmoreland). Da miedo sentarse a ver esta peli porque trata sobre el Alzheimer. ¿Quién tiene ganas de ver un dramón de este calibre? Pero vale la pena. Y es de una inmensa tristeza donde tiene cabida esa pizca de felicidad. Viva la madre que parió a Julianne Moore (protagonista). Y vivan las actrices de cincuenta así, en general.
-The imitation game (Dir: Morten Tyldom). Peliculón. Está basada en la vida del matemático Alan Turing y sobre el equipo que trabajó para descifrar el código Enigma en la II Guerra Mundial. Nuevamente se ha escrito mucho sobre si cuenta bien o no la vida de Turing. Y de nuevo, da igual. La peli es buenísima, con intriga que recuerda lo mejor de John le Carré y Keira Knigthley perfecta as usal. Y para saber quien fue Turing, a los libros o a "wiki la sabionda".
-Her. (Dir: Spike Jonze). Estoy segura de que todo el mundo ha visto esta peli. Pero la meto en la lista por si quedara alguien sin. Es compleja, profunda, conmovedora, visualmente emocionante, artística y la única vez que no me ha molestado severamente una voz en off. Y con Joaquin Phoenix. Ese hombre, ese labio. Qué manera tan dolorosamente sexy de romperse tiene este tío.
-Relatos salvajes (Dir:Damien Szifrom). Otra que ha visto todo el mundo. Si eres de los que no, vale la pena que pierdas un día de playa o de hotel o lo que sea que tienes pensado hacer hoy. Con Ricardo Darín. Y con la mejor boda de la historia del cine jamás rodada. He tenido que vivir 36 años para ver cómo una boda puede tener todos los ingredientes hortera que me hacen abrir la boca y todos los matices humanos que me hacen abrir el alma. Y además te ríes.
-Whiplash. (Dir: Damien Chazelle). Magnífica y nicho. Esta igual no gusta a todo el mundo. Pero a cualquiera interesado en procesos creativos en general y en la disciplina musical en particular le parecerá 'su' película por mucho tiempo.
Imagino que Interestellar, Ocho apellidos vascos y Big Hero las has visto. Si eres marcian@ y te las perdiste, que sepas que todo lo que has oído de ellas es verdad.