Dani Rovira tiene cáncer. Así lo ha manifestado él mismo a través de su perfil de Instagram, donde ha comunicado que se lo diagnosticaron hace una semana después de meses notando un cansancio y un malestar fuera de lo normal.
“Si decido hacer esto público es porque, para lo bueno y para lo malo, soy un personaje público”, ha asumido, pidiendo a los medios de comunicación y a las redes sociales que su enfermedad no se convierta en un “circo de especulaciones”.
El tipo de cáncer que padece, tal y como él mismo ha definido con nombres y apellidos, es un linfoma de Hodgkin. A partir de ahora, el actor de ‘Ocho apellidos vascos’ arranca una lucha “contra el bicho” tras someterse a su primer día de quimioterapia.
Para tranquilizar a sus seguidores, Rovira ha querido dejar claro que no tiene miedo, que está tranquilo y que esta “mochila” hará algo más pesada estos tiempos de incertidumbre provocados por el coronavirus.
Eso sí, al humorista no le “faltan fuerzas ni ganas para salir airoso de esta”. Los médicos ya le han manifestado que el pronóstico es bueno y que las sensaciones son positivas: “Eso sí, pasaré a formar parte de esa población de alto riesgo cuando las defensas y el sistema inmunitario empiecen a fallarme en unos días, así que tendré que cuidarme, cuidar y dejarme cuidar un poco más”.
Siguiendo las órdenes del estado de alarma, a Dani le tocará seguir “peleando y protegiéndonos en casa, con mis tres perretes y con mi compañera de vida, Clara”, a la que ha puesto en valor en su post, donde ha recibido miles de comentarios de apoyo. “Confío ciegamente en ellos. Sólo os pido que sigáis como hasta ahora. Cuidándoos los unos de los otros. Sumando solidaridad, humor, humanidad... Por mi parte, seguiremos arrimando el hombro desde casa”, ha defendido.
En esta racha tan complicada, Dani Rovira tiene claro que la única forma de coger fuerza es con humor y amor. “Es nuestra mejor receta”, ha reivindicado. “Pero para eso están los retos, para superarlos y que lo aprendido nos haga ser mejores persona”, termina su publicación.
Es un tipo de cáncer que se origina en el tejido linfático, donde están los glanglios y los órganos que forman el sistema inmunológico, el encargado de proteger el cuerpo contra infecciones y enfermedades.
Los signos y síntomas principales tienen relación con los ganglios inflamados, fiebre, sudores excesivos, pérdida de peso y cansancio. Es más común en el sexo masculino y el riesgo se ve aumentado cuando hay antecedentes familiares y es más común en adultos que tienen entre 20 y 40 años.