Gracias a Piqué y sus tuits-bomba se pensó que una boda entre Malena Costa y Carles Puyol era inminente. La pareja había cumplido un año en Roma, en un viaje romántico y ahora, de sopetón, lo han dejado. Este extremo fue confirmado por la propia modelo en uno de sus primeros actos como Reina del Cava. A juzgar por las fotografías, la ex del defensa del Barça se mantuvo en su papel en todo momento, pero a las primeras de cambio, se quedaba cariacontecida. Se lee en la prensa que estaba nerviosa y que, ya el mismo día en que la coronaron contestaba a las preguntas sobre su vida personal nerviosa y con evasivas.
En este contexto todo parece indicar que es Puyol el que lo ha dejado. Aunque ella ha dicho a los medios que "cuando algo se rompe es por los dos" y ha abierto una puerta a la esperanza diciendo que "todo el mundo tiene una crisis". Reconocía que para ella todo estaba resultando "duro". Pero lo de volver lo zanjaba con un "nunca se sabe".
Y el caso es que el capitán del FC Barcelona no ha dicho aún esta boca es mía, pero en su Time Line hay un retuiteo bastante elocuente y que si no lleva relación con sus problemas de pareja, Pep Guardiola es un sherpa tibetano muy popular. En él, Puyol destacaba una cita pseudofilosófica sobre el arrepentimiento.
Lo cierto es que en su escapada a Roma subieron fotos muy románticas a las redes sociales. Y Cuore les pilló besándose en plena calle de la Ciudad Eterna con lengüetazos de vaca. Todo este incidente ha pillado por sorpresa, tanto que por las palabras de Malena, parece que ni ella misma se cree que todo esto esté ocurriendo y está incluso confusa ¿Será una crisis temporal o un súbito adiós definitivo?