· Aitana: la generación Z comparte así
Ya lo demostró dentro de la Academia. Le gusta mucho publicar. Ha sido la más activa de sus compañeros durante el concurso y, como cabía esperar, así ha seguido en cuanto ha salido por la puerta grande. Aunque la preferidísima de España haya sido Amaia, la catalana le arrebata el puesto en redes con 889 mil seguidores en el momento de escribir este artículo, el millón ya está cerca.
Cosas que hace bien:
Los Instagram Stories: algo así como Aitana TV. Mantiene esa forma directa de comunicarse con sus seguidores que ya tenía. Entre trayectos, mientras camina o en taxis. Tal cual siente las cosas, las comparte: "Me doy un poco de vergüenza ajena pero quiero que sepáis que hoy el 'eyeline' me ha salido muy bien y más rápido que de costumbre", ha contado en uno de ellos, con plano detalle del ojo. Que levante la mano a quien este momento le representa. Tampoco faltan los vídeos cantando, claro está.
El equilibrio entre lo personal y las fotos pro: si dentro del concurso eran todo vídeos y fotos suyas o con sus compis, ahora la cosa se pone más profesional. Menos mensajes XXL expresando sentimiento y más fotos propias de 'influencer' con filtros retro y bien de arbolitos en flor por las calles londinenses. Sin perder su esencia y combinando ambas facetas.
'Lo natural': en definitiva, no puede negar haber nacido con un 'smartphone' bajo el brazo. La cámara 'selfie' no le asusta y cuando lanza "os quiero" a sus seguidores, lo hace de verdad.
Asignatura pendiente: huir del yo.
· Quim Gutiérrez: el paradigma 'millennial'
Nació en 1981, con el comienzo de esta generación, y es innegable. Se crió sin móvil pero el boom de las redes le piló ya de pleno en el mundo laboral y, como tal, lo ha usado como una herramienta más para crear su imagen y contarnos quién es. Así se presenta ante sus 244 mil seguidores.
Más comedido y más estudiado, artístico pero también personal. Lo mismo comparte una lectura, que un momento de merienda o una foto de su outfit, digna de Hypebae. Tampoco faltan los momentos más abstractos que captura con cámara analógica. Ay, la melancolía ochentera, Quim.
Asuntos de trabajo. También las usa como herramienta para promocionar sus proyectos, siempre con la elegancia y la mesura por bandera, nada de cuenta 'spam' que practican otros. No faltan las fotos de su compañera de reparto por excelencia: Inma Cuesta.
Títulos, menciones y 'hashtags' con mesura: los usa en su justa medida, pero que no falten.
Asignatura pendiente: darle más vidilla a los Stories.
· Bibiana Fernández: explosión 'baby boomer'
Bibiana es mucha Bibiana, también en Instagram. El mensaje de su bio lo dice todo: "La vida es ya". Una declaración de intenciones disfrutonas que también se extrapolan a su 'feed'. Siguiendo su buen hacer, casi 300 mil personas.
Fotones de un lifestyle que más quisieras: fotones de viajes y eventos, con gusto y sin perder el sentido del humor. Y, sobre todo, mucha reunión de amigos (y qué amigos): Martirio, Pedro Almodóvar y el constante recuerdo a David Delfín recuperando imágenes de sus momentos y enviándole mensajes de amor.
Trabajo y autopromoción: no faltan sus imágenes previas a salir ante las cámaras en El Programa de Ana Rosa. Claro que sí, a las redes hemos venido a jugar. Mostrar lo que se vale y ya de paso, enseñar modelito.
Sabe cómo derretirnos: las mascotas en Instagram son un género en sí mismo. Y conquistan a más de uno. Sus perritos Joe y Hope son 'guest stars' de su cuenta, pero sin abusar. Un plus.
Asignatura pendiente: Mejorar en el copy. Aunque siempre con frases que son para enmarcar, a veces pecan de extensos. Y ya se sabe: lo bueno, si es breve, dos veces bueno.