Lo último que sabíamos de Eugenia Martínez de Irujo era que había pasado el día de su cumpleaños en muy buena compañía. Fotografiada por su pareja, la aristócrata posaba desnuda y en la bañera mientras soplaba las velas. Lo que no sabíamos (ni siquiera ella misma) era lo que le esperaba unos cuantos días después. El madrileño Palacio de Liria se convirtió en una pseudodiscoteca a la que no faltó casi nadie.
Marta Sánchez, Ainhoa Arteta, Boris Izaguirre, Josie, Sofía Palazuelo, su sobrino Fernando Fitz-James Stuart, Carmen Lomana, Cayetana Guillén Cuervo y su marido Omar Ayyashi, y su hermano Cayetano Martínez de Irujo y Bárbara Mirjan, su pareja, fueron algunos de los asistentes que esperaron ansiosos a la llegada de la cumpleañera, que no sabía nada de la fiesta. Una vez dada la sorpresa, ideada por Narcís, comenzó el sarao, al que parece que no asistió su hija Tana Rivera.
El dress code implicaba peluca. O eso creemos después de ver a Cayetana Guillén Cuervo con un radical cambio de look. La actriz y presentadora dejó atrás su tradicional melena rubia para impactar con un corte desenfedado y en tonos caoba. Para animar el cotarro, uno de los grupos favoritos de Eugenia actuó. Hablamos de 'Los Secretos', que hicieron que la protagonista de la noche lo diese todo junto a su amigo Boris Izaguirre. En esto de las sorpresas también tuvo mucho que ver Marta Sánchez, que hizo un dúo con la banda de su mítico 'Déjame'.
Como detalle decorativo, a pesar del clasicismo que reina en Liria, los Martínez de Irujo se permitieron incorporar un elemento muy 'warholiano'. Una versión kitsch de una mítica foto de Eugenia con la tiara de su tía, la condesa de Teba. Entre las ausencias destacadas estuvo su hermano Cayetano que, después de un cruce de comentarios en los que criticaba la ausencia de Eugenia en el homenaje por la muerte de la Duquesa de Alba, parecen haber hecho las paces.