Esta es la razón por la que Froilán de todos los Santos disparóse sobre un pie, dice este tuit con imagen incrustada. Así de guasonas andan las redes sociales a propósito de los últimos accidentes de la Monarquía española.
Que no tienen pinta de ser los últimos a juzgar por el historial médico del Rey: En 1980, Juan Carlos dio un aviso saliendo de un tanque de la Brunete para inmediatamente estamparse de cabeza contra el suelo. En el 81, atravesó una puerta de cristal de la piscina de su palacio y no lo hizo precisamente como el Espíritu Santo en la virginidad perpetua de María, sino que tuvo que ser rápidamente ingresado en el hospital con múltiples cortes. La cosa ya empezaba a preocupar. En el 83 se rompió la cadera esquiando con la Infanta Elena. Eso era serio. En el 90, un accidente de coche con la otra Infanta, Cristina. En el 91, pierna escayolada en Baqueira. 95, muñeca rota en Candanchú. 96, se va el Monarca se va por el barranquillo en Sierra Morena. 2011, ojo pipa al golpearse con una puerta.
Ahora, cazando elefantes, otra vez la cadera rota. El historial médico del Rey es el típico de un deportista, dicen los galenos; un deportista como Robert Prosinecki, deberían añadir. Porque medio país se está partiendo el pecho de risa y las redes sociales son un buen reflejo de ello. Ahí van unos cuantos ejemplos con, por supuesto, famososo como protagonistas del cachondeo:
La actriz y mujer de Álex de la Iglesia ha contado no sin cierto pesar el chiste que lleva su nombre. Santiago Segura, que no le debe nada a nadie, bromea con mala leche sober la institución. Nuestro Nacho Montes, por su parte, lleva al terreno catódico las comparaciones. Es en este campo donde nos encontramos con un fotomontaje hilarante con el reality de moda como protagonista.
Porque sin duda alguna el pequeño Froilán es el que ha salido peor parado en la catareta de montajes:
y de tuits: