Hace 48 horas, la ciudad de Barbate fue testigo de una estampa histórica. Y no exageramos con el calificativo. Después de que Kiko Rivera le declarase la guerra a Isabel Pantoja en directo al detallar sus supuestos tejemanejes con la herencia de Paquirri, el DJ se reencontraba con Fran y Cayetano, sus hermanos, para dar el paso definitivo en su esperado acercamiento con esa familia paterna de la que llevaba más de 34 años distanciado.
En la eterna rencilla entre los Rivera y Pantoja, el hijo pequeño del torero siempre se había decantado por su madre. Fe ciega, lo ha denominado en más de una ocasión. Pero ahora, con los papeles que dejó su padre como legado, está dispuesto a cumplir sus últimas voluntades. Entre ellas, más allá de lo material, está recuperar el tiempo perdido con parientes a los que ni siquiera había tenido la oportunidad de conocer hasta hoy. Y su primera visita ha sido a su tío José Rivera 'Riverita', hermano de Paco, cuya delicada salud ha provocado que ese cara a cara con Kiko tuviese que ser cuanto antes.
No había medio en España que no recogiese esas imágenes de los tres hermanos saliendo de casa de su tío. Pero una vez pasado el fervor por este momentazo, llegaron las críticas, y no precisamente por la actitud del exconcursante de realities con su madre. Los comentarios en redes iban relacionados con la pandemia.
En primer lugar, con el hecho de que viajasen de Sevilla a Cádiz y viceversa sin mascarilla, tal y como se podría suponer en las fotos compartidas por Fran, Kiko y Cayetano en redes sociales. Pero lo que más les han achacado es que se hayan desplazado de municipio, algo que en Andalucía, perimetrada desde hace días, es imposible llevar a cabo salvo por causa muy justificada. Una razón de peso que el hermano mayor del clan se ha visto obligado a desvelar.
"Entiendo la situación tan dramática que estamos viviendo y que, evidentemente, las leyes están para respetarse y las respetamos", ha comenzado diciendo, haciendo referencia al pico de indignación que han generado estas comentadas imágenes. "Por desgracia nos hemos desplazado con una autorización del hospital de Cádiz porque mi tío José está con un tratamiento paliativo. Eso significa que está terminal", ha zanjado, tremendamente triste por tener que verbalizarlo.
"Nosotros hemos ido a despedirnos porque nos puede dejar cualquier día, según dicen los médicos. Me da mucha pena tener que dar tantas explicaciones y desde luego tenemos todo. Si las autoridades lo piden, por supuesto que vamos y enseñamos que estamos cumpliendo estrictamente la ley como hay que hacerlo por las restricciones perimetrales", ha dejado claro en este vídeo compartido en los stories de Instagram de Fran Rivera, que ha ocupado el rol de portavoz de los hijos de Paquirri, al menos en esta ocasión.