José Ortega Cano declaraba en una ocasión con respecto a sus hijos: "Han sido para mí un regalo de Dios. Tengo una pareja de niños guapísimos, me quieren mucho". Ahora ellos, que acompañan a su padre durante estas fatídicas horas, son el centro de atención de la prensa. Te contamos quiénes son y qué hacen.
José Fernando y Gloria Camila nacieron en Cali, una de las ciudades colombianas más pobladas, situada en el centro-sur del país. Ortega Cano y Rocío Jurado los adoptaron en 1999, cuando tenía seis años él y tres ella. Y dicen que durante el periodo de adaptación, la nueva familia pasó mucho tiempo junta en el Club Campestre de Cali. Nada más llegar a España, la tonadillera y el torero posaron con los niños en el jardín de su casa para presentárselos a la prensa y al mundo.
José Fernando cumplirá el próximo mes de junio 18 años. De él se sabe que no fue muy buen alumno en los años que estudió en Sevilla (en cierta ocasión, Ortega Cano comentó a la prensa que había sacado "unas notas regulares"). El año pasado se trasladó a Madrid para hacer un curso de informática. Tanto a él como a su hermana, les gusta mucho montar a caballo.
Su padre declaraba a la revista 'Diez Minutos' que es "más callado [que su hermana], pero tiene una profundidad muy grande. Se preocupa por todo lo mío muchísimo, desde cómo me encuentro físicamente a qué estoy haciendo en cada momento".
Gloria Camila cumplió 15 años en febrero. Toca el piano y estudia solfeo, y su padre aseguraba que "es una niña muy sensible, que se gana a todo el mundo". En otro momento, incluso se atrevió a decir que "va a ser artista porque canta muy bien". Ella protagonizó ese momento tan popular entre los admiradores de Rocío Jurado en el que, en medio de un programa de televisión y después de que la tonadillera le cantase una nana a sus hijos, su padre le preguntó "¿de qué equipo eres?" y ella respondió "¡de Rocío Jurado!".
El pasado mes de febrero, coincidiendo con el cumpleaños de Gloria Camilia, los dos hermanos participaron en un desfile de la diseñadora Rocío Trastallino para recaudar fondos para la Asociación Síndrome de Down de Sevilla. Él vestido con el típico traje de corto andaluz y ella, de faralaes.
Rocío Jurado les dejó en herencia el chalé de La Moraleja, 'Monte Alto', cuyo valor tuvieron que repartirse con Rociíto tras su venta. También heredaron los tres hermanos la finca 'Los Naranjos', en Cádiz.