Ricky Gervais sería un parado más en España como tuviera que presentar galas de los Goya con su genuino estilo ácido, provocador y hasta insultante. En los premios del cine español el humor es amable y las bromas "ad hominem" parecen directamente piropos. Eso sí, bastó que apareciera Santiago Segura para animar un poco el cotarro y que se hirieran las sensibilidades.
De Almodóvar, al que le echó en cara lo irascible que es, no se sabe nada. Pero de Kiko Rivera, del que se mofó sugiriendo jocosamente que no era amigo del trabajo, sí, porque el hijo de la Pantoja le da al Twitter:
La cosa no ha llegado a mayores. El director de Torrente se disculpó y le dijo que todo era una "chorrada" y encima "desde el cariño". Kiko no se lo tomó mal, pero señaló que está cansado de que le hagan siempre las mismas bromas. Prueba a dar otras versiones de ti mismo, te recomendamos desde aquí, y te las harán distintas.
Aunque para enfado, el de Eduardo Casanova. El actor estaba escandalizado por que su película favorita, 'La piel que habito', no recibiera más premios. "España me da vergüenza", "A la mierda los Goya", fueron algunos de los juramentos que expulsó por su Timeline.
Sin salir del plató de Aída, uno de los protagonistas de la gala sin estar nominado a nada, ni aparecer en ningún reparto, apareció posando en la alfombra roja primero con Leonor Watling y luego con su hermana, María León, que alzó una estatuilla. Lo primero que hizo tras escuchar su nombre fue abrazarse con él, y él ¿cómo se lo agradece? Publicando estas dos fotos en twitter acto seguido:
De mal humor también estaba Nuria Roca. Acabó la ceremonia y Televisión Española programó una película extranjera ¡Más indignación!
Y mientras todo el mundo criticaba el peinado de Belén Rueda, que parecía de cantante heavy de los ochenta, no es nada difícil averiguar quién salió en su defensa. Claro, Pilar Rubio, la presentadora que tiene una línea de ropa inspirada en los géneros del metal o música del mismísimo Diablo e hijos del trueno:
También gracias a la aludida red social descubrimos el cronómetro que mide las intervenciones de los premiados. Ese que no debió observar Lluís Homar. Twitter se convirtió en un hervidero de chistes sobre su discurso, que al público le pareció una letanía. "Me acaba de llegar un correo de Lluís Homar dedicándose su Goya", dijo un tuitero afincado en Alemania.
Pero nada como mantener las buenas costumbres. Desde que Guti llamara a Enemigos Íntimos para dar su apoyo a Marta López a eso de las dos de la madrugada, supimos que era noctámbulo y teleadicto aparte de tuitero empedernido. Ayer se confirmaron todos estos adjetivos. Eva Hache leyó un par de chistes, tuits simulados, sobre el ex futbolista y en pocos segundos obtuvo respuesta:
Sólo le faltó un ¡que me voy a casar con ella! A lo que nos tiene acostumbrados.