A Luis Medina le gusta su novia por sencilla, omite que está buenísima y forrada
Hay gente que no debería conceder entrevistas. Dejar que su belleza tuviera un halo de misterio y que el populacho imaginara que son brillantes, divertidos, inteligentes… Pero no, las personas se empeñan en responder preguntas de periodistas y meten la pata.
El caso más reciente es el del guapísimo Luis Medina. Él es como Paquirrín pero todo lo contrario. Es decir, el hijo de la Pantoja puede llegar a hacer hasta gracia por su ordinariez, su concepto tirando a machista de las mujeres, su simplicidad y al vástago de Nati Abascal le pasa lo mismo, incluso nos puede parecer que tiene su punto por lo estirado, snob (pero en mal), petardo y simplísimo que es.
En el QMD de esta semana ha comparecido para hablar no se sabe muy bien de qué, pero el caso es que le han preguntado por su novia, en la presentación de una marca de bañadores de la que él es imagen y él ha hecho unos comentarios que parecen una broma de los chicos de Muchachada Nui imitando al típico pijo con poca cosa en la cabeza.
Para empezar le preguntan que si quiere casarse con Amanda, que es modelo y ha posado en no sé dónde con un vestido de novia. Él dice que no y una de las poderosas razones que aduce es la siguiente: “como vivimos fuera, son pocos los momentos en los que nos vemos”. Pues no sé, a lo mejor si se casaran se verían más, por ejemplo…
Cuando le preguntan que si Amanda sería la candidata para futura esposa, contesta con una pasión y romanticismo desaforado: “Sí, Amanda es muy buena niña y nos llevamos muy bien”.
A ver esa respuesta la podía haber hecho Nati si le preguntaran por su posible nuera y todos pensaríamos que, en fin, está siendo diplomática, pero que Amanda le parece lo peor para su hijo. Pero que Luis diga eso, pues no sé, espero que Amanda no sepa español y no pueda leerlo.
Eso sí, cuando quieren saber qué le enamoró de esta rubia escultural, heredera del imperio Hearts, él dice que su forma de ser, porque es muy sencilla y natural. Vale, yo soy una rarita y a mí la gente sencilla y natural me horroriza pero bueno… digo yo que el hecho de que esté buenísima y que encima sea una de las herederas más ricas del mundo algo hará.
Pero la gran declaración, esa que, por lo snob que resulta nos llega incluso a gustar es cuando le interrogan sobre qué tipo de bañador le gusta para una chica. La respuesta es, desde luego, digna de un hijo de la Abascal: “Los tangas no me gustan nada. Yo estoy con una niña (los pijos sevillanos a las chicas les llaman niñas, no piensen mal) y se pone un tanga y es que no. Estéticamente no me gustan”.
Pues eso, como Paquirrín pero al revés.