Madonna explica por fin por qué no se depilaba las axilas de joven
Madonna fue la musa sexual del mundo occidental de los 90 y hoy en día sigue siendo una cincuentona de muy buen ver, pero no siempre ha sido así. La diva tuvo serios problemas para ligar durante su adolescencia por querer llevar las axilas sin depilar. Y es que para rebelarse contra las pandillas de las 'guapas y populares' del instituto decidió ir por la vida convertida en la hija adolescente de Chewaka.
“Los chicos del colegio se reían de mi y me llamaban monstruo peludo”, declara la Reina del Pop. La diva cuenta en el último número de Harper's Bazaar que cuando llegó al instituto y vió como se comportaban las chicas para ligar decidió rebelarse y actuar de forma totalmente contraria. “Pasé de llevar maquillaje, de hacerme peinados y de depilarme. Tenía los sobacos peludos”.
En este viaje para encontrarse consigo misma, la que luego sería imagen internacional de Max Factor, salía de marcha sólo por locales de ambiente gay. “Los hombres heterosexuales no me encontraban atractiva”, declara. Lo curioso es que según ella esta desdida de los chicos hacia ella no era por la pelambrera sobaquil y el bigote, sino porque “me tenían miedo porque era diferente”.
La historia se ha repetido con Lourdes María, quien hasta hace bien poco lucía orgullosa un adolescente mostacho y un poblado entrecejo.
Tras las declaraciones de la cantante, actriz, directora, diseñadora y empresaria de gimnasios entendemos que este look de adolescente peluda viniese incitado por su protectora madre. Sin embargo, de un tiempo a esta parte, Lourdes luce una imagen mucho más suavizada.
“A ella le encanta la moda y el estilo”, dice Madonna sobre su primogénita. Madre e hija han puesto en marcha la marca de ropa para adolescentes 'Material Girl' y según comenta la intérprete de 'Give me all your love', “ella ayuda en el diseño de la colección y yo me limito a mirar”.
Sin embargo, como cualquier madre ayuda cuando la ve perdida: “Miro sus blogs