Muere Beatriz Arrastia, madre de Isabel Preysler, a los 98 años
Arrastria vivía con su hija en su casa de Puerta de Hierro
La familia está muy dolida, en especial Tamara Falcó que en unos meses ha despedido a su padre, su tío y, ahora, a su abuela
Beatriz Arrastia, la madre de Isabel Preysler, ha fallecido este domingo a los 98 años de edad arropada por toda su familia. La progenitora de la socialité vivía con su hija en su mansión de la capital desde que enviudara hace 29 años.
Madre de seis hijos (Victoria, Enrique, Isabel, Carlos y los mellizos Joaquín y Beatriz), Arrastia nació en Filipinas, donde vivió y crío a Isabel y a sus hermanos hasta 1992, año en el que perdió a su marido Carlos Preysler y se trasladó al domicilio de su hija en Puerta de Hierro.
Beba, como cariñosamente la llamaban sus nietos, únicamente apareció una vez en televisión. Fue hace dos años, cuando Tamara Falcó y Julio José Iglesias decidieron sorprenderla en el programa de Telecinco Volverte a ver. "No tengo palabras para expresar el cariño que les tengo. Me sale del alma. Me conocen bien, saben lo que quiero", comentaba la mujer agradecida. "Gracias por ser la mejor abuela del mundo", decían.
"Ella nació en el campo, en Filipinas, se enamoró locamente de mi abuelo, vivió la II Guerra Mundial y tuvo seis niños. Y tiene esa fe, ese amor inquebrantable... Que conservó incluso cuando se mudó a España, aun cuando en casa nadie iba a misa y nos metíamos bastante con ella", decía recientemente la Marquesa de Griñón sobre su difunta abuela. Para ella, Betty era un pilar fundamental en su vida. Probablemente haya sido la nieta con la que más tiempo pasó en vida, pero además, Tamara heredó de ella su fe.
Isabel Preylser heredó de su progenitora su look exótico, también su elegancia y saber estar; algo que Tamara resaltaba durante el espacio conducido por Carlos Sobera. "En Filipinas eran consideradas muy guapas las hermanas Arrastia", decía. También recordaba que había aprendido de ella a educar a sus hijos: "Con nosotros es muy dulce pero de madre era bastante más estricta. Eso lo ha heredado nuestra madre".