Paula Echevarría tiene un vicio durante la cuarentena: "Más de uno va a tener que ir a por más"

Esta cuarentena está sacando a relucir lo peor y lo mejor de nosotros mismos. También de los vips, que han hecho de sus redes sociales un acto de naturalidad. Porque, ¿para qué van a fingir que no están en pijama todo el día si son iguales que el resto de los mortales? Esto es lo que ha sucedido con Paula Echevarría, que está mostrando una realidad sin filtros durante los días que llevamos de aislamiento.

Bajo el hashtag #YoMeQuedoEnCasa, la actriz está haciendo partícipes a sus más de tres millones de seguidores en Instagram de sus recetas con Daniella Bustamante, sus videoconferencias con ‘las Pencas’ y sus planes románticos (en el sofá) con su chico, el futbolista Miguel Torres.

Lo último que nos ha chivado de su intimidad es cuál está siendo su ‘guilty pleasure’ durante estos días eternos de encierro. Seguramente sea también el tuyo, y el de todos: se trata del cacao con avellana, un vicio con el que ha posado orgullosa a través de sus stories, reflejando su desesperación bajo el hashtag #CuarentenaDía18.

Además, augurando que serán muchos los españoles que estarán igual que ella, Paula Echevarría ha mandado un mensajito a los supermercados para que vayan reponiendo. “Más de uno se va a tener que ir a por chocolate”, comenta con ironía mientras moja un colín en el bote de cacao.

Paula Echevarría tiene el look perfecto para sobrevivir a la cuarentena

El sentido del humor es algo que nunca falta en el feed de Instagram de Paula. Así lo demostró hace unos días mostrando el que ya es por derecho propio su “uniforme” durante el confinamiento. Un pantalón holgado de chándal gris y su sudadera de la marca Pink Flamingos (con un flamenco bien grande en el pecho) son las prendas de las que la it girl no se ha separado estas dos últimas semanas, con permiso de sus zapatillas de estar por casa.

Pero el tiempo de encierro, que cada vez va a más, nos está haciendo ser más creativos. En el último post compartido en su tablón, Echevarría hacía visible su necesidad de quitarse el uniforme y vestirse con ropa normal. “Eso sí, lo de los zapatos por casa sigo sin verlo…”, apuntaba. “Quizás porque es domingo o porque llevo 18 días con un pantalón de algodón y una sudadera (bueno, no los mismos)”, planteaba, mostrando la falda-pantalón de Zara y la blusa estampada de la firma de su amiga Dolores Promesas.