¿Hubo Photoshop en las fotos ‘sadomaso’ de Amaia Montero?
Alba Peguero
10/11/201108:46 h.En la última semana hemos sido testigos de cómo dos divas de la canción nacional posaban de un modo provocativo y con una figura muy estilizada. Mientras que Chenoa, en Must! Magazine, aparecía con un look de ‘femme fatale’, Amaia Montero lo hacía con una temática ‘sado’ en Shangay Express. Ambas nos tienen acostumbrados a las prominentes curvas de sus cuerpos, pero en sus últimas fotografías nos han sorprendido con una línea de sílfide, encorsetadas y con voluptuosos pechos. Todo en uno, todo perfecto ¿Cómo es posible?
Nos preguntábamos cuál sería el truco y nos pusimos en contacto con los organizadores de la sesión. Según nos contó Roberto Sánchez, director de arte de Shangay, Pepe Botella, el fotógrafo, había tenido una sesión tres semanas antes donde se jugaba con un estilismo muy diferente. Entonces, al proponerle un nuevo reto, este posado con look dominatrix. Sin embargo, se quedaron anonadados cuando apareció Amaia. En tan sólo unos días había pegado un cambio considerable: "Estaba estupenda y mucho más estilizada, nos quedamos todos sorprendidos".
Se conoce que Amaia se había tomado muy en serio la promoción de este disco. El fotógrafo nos lo explicó así: "está trabajando en su historia y le va muy bien". ¿Cuál será esa 'historia' milagrosa?
Amaia había logrado un cuerpo tan trabajado que apenas necesitó del retoque fotográfico. “El PhotoShop se ha utilizado lo justo, para el tratamiento de la foto, los colores y la luz pero, la verdad, ella es la verdadera protagonista y no ha necesitado arreglos para camuflar defectos”, asegura Pepe.
Aunque, a pesar de la rápida transformación, su espectacular presencia se la debe a una serie de trucos que han favorecido que el resultado sea impecable. “Las posturas que utilizamos y esos corpiños tan reforzados ayudaron a conseguir una línea mucho más estilizada”, reconoce el fotógrafo.
Pero no solo por un buen físico se revaloriza una instantánea. Botella destaca muchísimo la actitud que tuvo Amaia Montero durante la sesión: “Tiene un acting muy genial, sabe meterse en el papel porque es una profesional divina y consiguió crear un ambiente mágico. Lo demás salió solo”.
A pesar de que Amaia nos tiene acostumbrados a una imagen azucarada, el objetivo de Shangay era conseguir una imagen impactante, totalmente contraria al cliché que se presupone al pensar en ella, algo para lo que se prestó encantada, según remata Roberto Sánchez: “No se mostró reacia en ningún momento, de hecho ella pedía exagerarlo todavía más, pero tuvimos que frenarla”.