Quien tiene un amigo tiene un tesoro y quien tiene un amigo rico y famoso tiene un yate donde pasar las vacaciones de verano. Seguro que recuerdas la imagen de Eugenia Martínez de Irujo, Penélope Cruz y otras celebrities contoneando sus curvas en la cubierta de alguna embarcación. Pues bien, ellas siempre van de invitadas. No son casos únicos, por regla general, todo el mundo va de gratis a estos palacios flotantes. Eso sí, de vez en cuando alquilan uno y se convierten en anfitriones. Su precio ronda los 7.500 euros... al día. Mejor si son en propiedad.
Paris Hilton, Mischa Barton, los Beckham y Sharon Stone son sólo algunas de las celebrities que han sido invitadas por el diseñador amante de los estampados de tigre a pasar unos días a bordo de su modesto navío. La cubierta del yate, valorado en 40 millones de dólares, suele estar repleta de estrellas en temporada alta. Esto, en un yate, significa: Cannes. Si no has pasado por allí durante el festival de cine es que no eres una celebridad. Cavalli, que tonto no es, también lo alquila de vez en cuando a sus amigos aunque no sabemos a cuánto sale la noche en la barquita. Mariah Carey lo ha arrendado en alguna ocasión para escaparse con su marido Nick Cannon.
El genio de la Fórmula 1 también tiene yate y siempre está lleno de famosos. Bueno, siempre no, en mayo de este año, la policía italiana le confiscó el navío por un presunto fraude fiscal. Resulta que Flavio, para ahorrarse unos eurillos en impuestos tiene una especie de presunta triquiñuela por la que no consta como propietario, sino como arrendatario. Nada de qué preocuparse, hace unos días estaba ya otra vez surcando el mar Mediterráneo con Leonardo DiCaprio y Naomi Campbell, entre otros. A su mujer, Elisabetta, le encanta pasar los días abordo con su pequeño cachorrito de tan sólo unos meses de edad. Fernando Alonso y el matrimonio Aznar-Agag también han hecho noche en este hotel con hélices.
La maniquí y su esposo tienen en propiedad un barquito que no tiene nada que envidiar al de Cavalli o Briatore. Eso sí, parece que ellos no tienen ganas de seguir prodigando su embarcación. Tras los problemas con la Justicia con los que lidia Javier Merino, la pareja ha decidido poner la embarcación en venta por unos seis millones de euros. El yate se llama 'Fortuny' y el nombre tiene su origen en la discoteca homónima que el empresario posee en Madrid. Sí, esa versión un poco más VIP de 'La Posada de las Ánimas'. ¿Algún fan de Mar Flores pagará por el barco para retozar donde otrora lo hiciese la ex novia de Alessandro Lecquio?
El compositor de 'Candle In The Wind' es otro de esos generosos famosos que invitan a sus amigos a pasar unos días de vacaciones por la cara, sin pagar dietas ni alojamiento. Eso sí, hay que comportarse en el yate de Sir Elton o te vas a la calle más rápido que Speedy González. Lo sabe bien Paris Hilton, que fue invitada por el cantante y su novio David Furnish para luego ser expulsada tras ser descubierta en los baños haciendo cositas con un novio que tenía por aquel entonces. Esta muchacha es insaciable.
El diseñador italiano es uno de los más ricos del mundo, su fortuna, según Forbes, está valorada en 2.800 millones de dólares y una de sus inversiones más importantes es su yate. Por él han pasado las celebrities más importantes del planeta y en verano está más transitado que la Fontana di Trevi en agosto. Jennifer López es un clásico a bordo de este barquito de extremo lujo. También Penélope Cruz, Bar Refaelli y la propia familia del dueño de Emporio Armani. Lo que no debe de tener su yate es un protector solar adecuado, porque menudo tanning extremo que lleva el muchacho.
¿Con qué barquito te quedas?