Cinco mascarillas para el óvalo facial que previenen el descolgamiento y la formación de papada
¿Qué es el ayuno cosmético?
La cosmética puede convertirse en una buena aliada para unas facciones más definidas
Un signo de envejecimiento que preocupa a un alto índice de mujeres
En el mundo de la belleza podría afirmarse que los que más preocupa a las mujeres es todo aquello relacionado con la salud capilar y el aspecto de la piel (ya sea envejecimiento, acné, sequedad…). En este segundo grupo, destacan el descolgamiento en el óvalo facial y la papada, dos de los signos más evidentes del envejecimiento facial.
A medida que pasan los años, la piel pierde elasticidad y firmeza, lo que puede dar lugar a un aspecto flácido y caído en la parte inferior de la cara muy poco favorecedor pero que por suerte se puede prevenir gracias a la cosmética y otras soluciones como por ejemplo el yoga facial.
MÁS
La cosmética, tu aliada
Para prevenir el descolgamiento en el óvalo facial y la papada, es importante usar productos ricos en ingredientes como ácido hialurónico, glicerina y ceramidas, que ayudan a retener la humedad en la piel. Además, beber suficiente agua durante el día también puede ayudar a mantener la piel hidratada desde el interior.
Asimismo, al elegir cosméticos antiedad, conviene buscar aquellos que contengan retinol, péptidos, vitamina C y ácido hialurónico, conocidos por sus propiedades para estimular la producción de colágeno y elastina en la piel. A la hora de aplicarlos, hay que realizar movimientos desde el centro del cuello hacia el exterior y masajear con la yema de los dedos por debajo del mentón hasta las orejas. Si no sabes por dónde empezar, te recomendamos cinco mascarillas muy efectivas.
HD Epilift cuello y escote. Rejuvenece el cuello y reduce los efectos del ‘tech neck’ (producido por el uso de dispositivos electrónicos demasiado tiempo y en una postura en la que dejamos que los hombros y la cabeza caigan hacia delante). Contiene pimienta rosa, con acción lipolítica y drenante que evita y minimiza la aparición del doble mentón, disminuyendo la grasa de la zona y evitando su acumulación. Precio: 30,95€.
LiftDefine Radiance Face Mask, de Shiseido. Un dúo de mascarillas ricas en esencias que se combina con una exclusiva fórmula efecto lifting para mejorar visiblemente los signos de envejecimiento: arrugas, falta de luminosidad y flacidez. Precio: 134€.
Time-Filler Mask, de Filorga. Una mascarilla con un doble efecto alisador: tensor y rellenador cuya fórmula enriquecida con activos tensores combinados con colágeno de origen natural alisa visiblemente las arrugas a la vez que estimula la regeneración de la piel. Precio: 99€.
Talika Bio Encimas Mascarilla Cuello 12g. Contiene una alta concentración de colágeno, ácido hialurónico, adenosina y un complejo de 17 plantas gracias a los cuáles el cuello se verá mucho más rejuvenecido. Precio: 7€.
X Lifting Mask, de Boutijour. Una mascarilla reafirmante del contorno facial. es una combinación de hidrogel enriquecido con extractos botánicos y tela de algodón especialmente tejida y muy elástica. Precio: 61,99€.
Lo que debes saber sobre el yoga facial
Como se comentaba al inicio del artículo, el yoga facial también resulta muy efectivo a la hora de tonificar los músculos, incluyendo los que se encuentran en la zona de la papada, siempre y cuando se realicen de manera constante y se combinen con una buena rutina cosmética. De cara a que el óvalo facial se vea más definido, estos ejercicios se centran en fortalecer y tonificar los músculos del cuello y la mandíbula. También pueden mejorar la circulación sanguínea y la elasticidad de la piel, lo que también contribuye a prevenir la formación de arrugas y líneas finas en la zona de la papada.
Para las que deseen empezar a practicar desde hoy mismo, pueden empezar con el ‘masaje de doble mentón’. Para ello hay que colocar los dedos debajo de la mandíbula y realiza un suave masaje en forma circular. A medida que masajeas, aplica una presión suave hacia arriba para tonificar los músculos de la zona de la papada.
Otro muy popular es el ‘beso al techo’. Siéntate con la columna recta y estira el cuello hacia el techo. Luego, frunce los labios y haz un beso en dirección al techo, manteniendo la posición durante unos segundos antes de relajar los labios. Repítelos varias veces al día para mejorar la circulación sanguínea y la elasticidad de la piel.
Si combinas el yoga facial con buenos cosméticos y una dieta e hidratación saludables, notarás los resultados en unas pocas semanas.