La manicura es ese toque de glamour ideal que necesitamos para nuestros looks diarios, y elegir una que sea semipermanente es perfecto para disfrutar de un resultado impecable y duradero. Además, puedes hacerte las uñas semipermanentes en casa, cómodamente y con un resultado digno de una profesional. Te contamos cómo conseguirlo para presumir de una manicura que derroche estilo.
Para dar el paso definitivo a la manicura semipermanente, es imprescindible que tengas los materiales adecuados. Toma nota de cuáles son y hazte con ellos:
Prepara adecuadamente tus uñas antes de aplicar cualquier producto. Lo primero que tienes que hacer es retirar cualquier resto de esmalte de tus uñas y luego cortarlas con la longitud y la forma que elijas. Empuja las cutículas con el empujador y alisa la superficie de tus uñas con el bloque de pulido para que la base sobre la que vayas a aplicar el esmalte sea uniforme.
Ha llegado el momento de aplicar una capa delgada de la base coat en todas tus uñas, asegurándote de cubrir también los bordes. Después, coloca las uñas bajo la lámpara LED el tiempo que se recomiende en la lámpara que tengas.
Cuando haya terminado el tiempo de secado, ya puedes aplicar el esmalte en gel. Usa el color que hayas elegido para tu manicura y aplica una delgada capa en cada uña. Después, vuelve a poner tus uñas en la lámpara LED para que se seque el esmalte.
Cuando el esmalte en gel este seco, hay que aplicar una nueva capa, esta vez de top coat. Este producto se encargará de sellar y proteger tus uñas para que consigas una manicura semipermanente. Para que no hay un desgaste prematuro, asegúrate de cubrir bien los bordes de cada uña. Ha llegado el momento del secado final, así que vuelve a colocar tus uñas bajo la lámpara LED para que queden impecables.
Para que tu manicura semipermanente se mantenga en perfecto estado el mayor tiempo posible, no hay nada como el cuidado, evitando aquellos gestos y actividades que puedan dañarlas y usando lo mínimo posible cualquier producto químico que sea agresivo.
Cuando quieras eliminarlas, haz una bola de algodón para cada uña y sumérgelas en quitaesmalte de gel. Coloca una bola en cada uña y envuelve con papel de alumino. Deja que el quitaesmalte actúe durante unos minutos, quita el algodón y retira el esmalte con ayuda de un palito de naranjo.