Cada temporada el abanico de colores de maquillajes y manicuras cambia, y con la coloración capilar y los peinados sucede lo mismo. Si en verano los rubios suelen ser las tonalidades favoritas, con la llegada del otoño y la bajada de temperaturas, comienza de forma paulatina el oscurecimiento de la melena, una tendencia que cada año se reinventa en los salones de belleza y que este año tiene un protagonista procedente de los países nórdicos: el Brunette Scandi.
Una de las características distintivas de este color es su enfoque en tonos oscuros donde los colores base suelen ser castaños profundos, que van desde tonos chocolate hasta marrones suaves (que por cierto, en nuestro país ha ganado popularidad con figuras como María Pombo o estrellas internacionales como Hailey Bieber). Estos tonos ayudan a crear una base sólida y profunda para el look, y son especialmente favorecedores para personas con tonos de piel claros a medianos.
Además de los tonos oscuros, el Brunette Scandi incorpora reflejos sutiles y fríos para agregar dimensión y luminosidad al pelo. Como explica el director de Maison Eduardo Sánchez, Eduardo Sánchez, “es el color perfecto para las españolas morenas puesto que logra un resultado muy luminoso. El secreto está en adaptar el color a cada mujer eligiendo entre los reflejos miel o castaño”. Y añade que “se empieza difuminando mucho el tono en la raíz y saturando más las puntas”.
Tal y como explica, los reflejos se aplican de manera estratégica y se mezclan suavemente con el color base, evitando contrastes demasiado marcados. Los reflejos pueden variar desde tonos ceniza hasta rubios claros, dependiendo del resultado deseado y del tono de piel de cada persona.
Uno de los puntos clave del Brunette Scandi reside en su naturalidad, que permite que mantenerlo no conlleve demasiados cuidados. A diferencia de otras tendencias de color de pelo más llamativas, este estilo busca resaltar la belleza natural de cada persona sin que el cabello se vea excesivamente procesado. Por eso se recomienda mantener la raíz oscura, lo que crea un efecto de profundidad y hace que el color se vea más natural a la vez que se aportarán distintos toques de luz para enmarcar el rostro, muy favorecedores.
Como cualquier look que conlleva la aplicación de una coloración, para que esté igual de sano y luminoso que el primer día, la hidratación es clave. No pueden faltar en tu neceser tanto un champú como un acondicionador especiales para cabellos teñidos, así como aplicar una vez a la semana una mascarilla de medios a puntas para evitar que se debilite. En la medida de lo posible evita el uso excesivo de herramientas de calor y protege el pelo del sol para evitar la decoloración. Notarás la diferencia.