La Reina Letizia es uno de los mayores referentes de estilo en nuestras fronteras, ya no solo en lo que a moda se refiere, también en el ámbito de la belleza. De ahí que cualquier peinado o maquillaje que luzca suela ser analizado con lupa, sirviendo de inspiración para todas las mujeres que buscan un ‘beauty look’ sofisticado y elegante que no necesite demasiados aderezos.

Aunque es muy habitual verla con la melena suelta, también se apunta a las tendencias capilares más punteras como las coletas pulidas, los peinados efecto mojado, las trenzas o los semirrecogidos. En los últimos tiempos se le ha visto con una de las tendencias capilares más demandadas en las peluquerías: las ondas cowgirl.

Un peinado juvenil y muy favorecedor que aporta luminosidad al rostro y con el que la melena se ve repleta de movimiento. Para aprender cómo conseguirlas hemos hablado con la estilista Ágatha Ortiz, quien indica que, para lograrlo, en primer logar hace falta lucir capas finas en el cabello de medios a puntas para poder manejarlo más fácilmente y lograr ese efecto de la onda hacia afuera.

“Las ondas cowgirl que suele lucir la Reina Letizia son un peinado que requiere de mucho trabajo de cepillo y secador, por lo que es muy complicado realizárnoslo a nosotras mismas sin ayuda. Lo que se busca es crear unas ondas con movimiento, hacia afuera, que vayan hacia atrás y que dé la sensación de una melena sin peso, con mucho movimiento”. Comienza diciendo.

Cuenta que, aquellas que tengan destreza con el secador, tendrían que hacer ‘brushing’ y luego jugar con una tenacilla y mechones anchos. “Sin embargo, existen otras alternativas con las que podemos conseguir el mismo efecto, una de ellas la encontramos en accesorios que simulen esa labor, como por ejemplo el Dyson Ariwrap. Posee un barril con el que secamos el pelo con la misma forma del cepillo, por lo que resulta bastante sencillo y además deja una forma en el mismo prácticamente impecable, con las puntas hacia afuera”.

Añade que otra opción consistiría en utilizar una herramienta de calor, como un tenacilla con un barril bastante ancho, y enrollar los mechones de pelo sobre sí mismos, a modo de rulos, con las puntas hacia afuera, para crear ese mismo efecto. “Para que el resultado sea más duradero, después de rizar el mechón, conviene sujetar el rulo que se ha creado con una pinza hasta que se enfríe. Así con todos”.

Para terminar, recomienda peinar la melena con los dedos para deshacer ligeramente las ondas y que se vean más naturales, y finalmente sellar el resultado con un poco de laca.