Aunque en el mundo ‘beauty’ las investigaciones para lograr dar con cosméticos cada vez más eficientes son una realidad, también es cierto que es un terreno en el que los 'dimes y diretes' están a la orden del día. Y es que, en la búsqueda de la belleza y la eterna juventud, parece que toda idea es bienvenida, careciendo en muchos casos de rigor científico, pudiendo ser un auténtico fiasco, e incluso suponer un riesgo para la salud. Algunos de los más populares podrían ser desde el uso del ibuprofeno machacado para combatir los granos a la aplicación de pomada de hemorroides para reducir las bolsas debajo de los ojos con los que parece que se consiguen auténticos milagros. Pero ¿qué hay de cierto en estas prácticas?

"El aplicar medicamentos que son de uso oral como un cosmético de uso tópico no hará efecto en la piel. Pensemos que la piel es un órgano que dificulta la permeabilidad y necesita de ingredientes que sirvan de vehículo para que el cosmético penetre en los tejidos. Por eso insistimos tanto en cosmética en cómo van vehiculizados los cosméticos, ya que no solo se trata del ingrediente, sino de cómo está formulado para que realmente penetre y sea efectivo" cuenta Sonia Ferreriro, biotecnóloga y cosmetóloga en Byoode.

A continuación, revelamos qué tienen de cierto algunas de estas creencias de la mano de expertos que además proponen alternativas más efectivas -y saludables- para que logremos nuestros objetivos.

Se conoce que la pasta dental es, sin duda, una de las soluciones caseras más conocidas para tratar las quemaduras. Aunque muchos afirman que la pasta dental puede proporcionar alivio del dolor o sensación de “frescor”, así como prevenir infecciones, esta no está formulada con ingredientes específicos para tratar quemaduras y no tiene principios activos que ayuden a la cicatrización. “Por lo que en general, no se recomida su aplicación directamente sobre una quemadura, ya que después se pondrá dura y pegada a la piel, lo que puede resecarla más; de hecho, la pasta de dientes puede contener ingredientes irritantes que pueden empeorar la lesión y retrasar la cicatrización”, explica el equipo médico de la Clínica Mira+Cueto.

En lugar de usar pasta de dientes, hay muchas otras opciones para realizar al tener una quemadura, sobre todo en las de primer grado que suelen ser las que tenemos más comúnmente en casa, lo ideal es enjuagar y enfriar con agua fría la quemadura el tiempo que sea necesario, para aliviar el dolor y secar sin frotar. Después hidratarla zona o zonas afectadas, con cremas hidratantes que contengan urea, ácido láctico, o aloe vera (calmante y regenerativo) e incluso miel”, añaden.

El ibuprofeno, un medicamento comúnmente utilizado para aliviar el dolor y la inflamación, ha ganado cierta popularidad como remedio casero para tratar los brotes de acné. Se argumenta que triturar una tableta de ibuprofeno y aplicarla directamente sobre el grano puede ayudar a reducir la inflamación y el enrojecimiento de la piel.

Sin embargo, los expertos en dermatología advierten sobre los peligros potenciales de este enfoque, pues el ibuprofeno está destinado a ser ingerido y no está formulado para su uso tópico en la piel. Aplicarlo triturado puede causar irritación, quemaduras químicas y reacciones alérgicas en la piel sensible del rostro. Además, no hay evidencia científica que respalde su eficacia en el tratamiento del acné. En su lugar, es recomendable buscar productos específicamente diseñados para combatir el acné y consultar a un dermatólogo para un tratamiento adecuado.

Otro mito que circula en el mundo de la belleza y cuya popularidad se debe a la creencia de que los ingredientes antiinflamatorios presentes en estas cremas pueden disminuir la hinchazón y mejorar la apariencia de las bolsas. Aunque algunas personas afirman haber experimentado resultados temporales al aplicar pomada de hemorroides en el área de los ojos, los expertos desaconsejan encarecidamente esta práctica. Las pomadas para hemorroides están formuladas para tratar una afección específica en una parte diferente del cuerpo y pueden contener ingredientes que no son seguros para la delicada piel alrededor de los ojos.

En palabras de Raquel González, cosmetóloga y directora técnica de Perricone MD: "Cada producto de uso tópico está formulado para una zona concreta. Una pomada para las hemorroides puede reducir la inflamación en ciertas zonas, como el caso de los ojos, pero por contra, puede acarrear otros efectos, como la aparición de milliums o la irritación, ya que es una zona muy sensible y que requiere de productos formulados específicamente para ella".

Es común escuchar que lavarse la cara con agua fría ayudará a cerrar los poros y reducir su apariencia. Sin embargo, esta afirmación es más un mito que una realidad. Los poros no tienen músculos que puedan abrirse o cerrarse, por lo que no pueden ser afectados significativamente por la temperatura del agua. Puede, de hecho, ayudar a calmar la piel y reducir la inflamación temporalmente, pero no tiene un efecto duradero en el tamaño de los poros. Para minimizar su aspecto, lo más adecuado es adoptar una rutina de cuidado de la piel que incluya limpieza regular, exfoliación suave y el uso de productos que ayuden a mantener la piel limpia y libre de obstrucciones.

La responsabilidad de la dieta en la formación de lesiones acnéicas y su empeoramiento sigue siendo controvertida. En los últimos años se han realizado varios estudios sobre la relación del chocolate con el desarrollo del acné y los resultados siguen siendo contradictorios. Por un lado, en algunos parecen reflejar el aumento de la producción de sebo, mientras que en otros lo achacan a los azúcares y grasas que se le añaden la mayoría de las veces (puesto que no hay que olvidar las propiedades antiinflamatorias del cacao).

Hay estudios que mencionan que no hay una relación causal directa entre el consumo de chocolate y la aparición de acné. Es decir, el chocolate no es una causa de acné, tienen que coexistir otra serie de factores como los hormonales, exceso de sebo y factores infecciosos, influyendo también la genética, estrés e incluso el consumo de tabaco. Así que, en efecto, puedes comer esa onza de chocolate sin preocuparte de si te saldrá un grano al día siguiente.

Otro mito común en el mundo del cuidado del cabello es la creencia de que cortar el pelo con regularidad estimula el crecimiento. Aunque recurrir a la tijera regularmente puede ayudar a mantenerlo saludable al prevenir las puntas abiertas y el daño, no afecta el crecimiento real del cabello en el cuero cabelludo. El crecimiento del cabello está determinado por factores genéticos y hormonales, y no por la frecuencia con la que se corta. Así que, para promover una melena fuerte y saludable, es importante mantener una dieta equilibrada, reducir el estrés y seguir una rutina de cuidado adecuada que incluya lavado suave, acondicionamiento regular y protección contra el daño causado por el calor y los productos químicos.

Estos son solo algunos de los ‘mitos’ más significativos, pero la lista es interminable. Por eso, en lugar de recurrir a soluciones no probadas y potencialmente peligrosas, es importante adoptar un enfoque más seguro y efectivo para el cuidado de la piel. Para ello resulta imprescindible mantener una rutina de limpieza, hidratación y protección solar diaria; además de cuidar la alimentación y el descanso.