Claves infalibles de un maquillaje natural para mujeres de más de 40

Como todo en esta vida, nada es permanente, y en el ámbito de la belleza las rutinas de cuidado van cambiando en función del paso de los años. La piel no es la misma en la adolescencia y la madurez, y tampoco los productos y componentes que la deben acompañar en este camino. A medida que cruzamos la barrera de los 40, hay que comprender que para lucir nuestra mejor versión, la clave no es ocultar, sino resaltar la belleza natural con técnicas y cosméticos específicos.

Mantenerla perfecta es sinónimo de establecer unos hábitos en los que la hidratación y la nutrición sean los dos puntos fundamentales a seguir. Para ello hay que incorporar desde sérums ricos en antioxidantes a cremas hidratantes y, por supuesto, un protector solar de amplio espectro para prevenir el envejecimiento prematuro.

El trabajo de la piel

La filosofía del ‘menos es más’ se vuelve aún más relevante en la década de los cuarenta. Así que evita la aplicación excesiva de productos y opta por bases ligeras que ofrezcan una cobertura natural sin saturar el cutis. Las bases líquidas o BB creams son ideales, ya que proporcionan una cobertura suave y se adaptan a la textura de la piel madura.

Por otro lado, el iluminador es otro de los aliados que no puede faltar en tu neceser, pues hará que se vea más joven de forma casi instantánea. Concéntralo en áreas clave como los pómulos, el arco de Cupido, el puente de la nariz y el lagrimal; y si es posible, decántate por fórmulas líquidas o en crema para un brillo natural.

En cuanto al corrector, sucede lo mismo que con los iluminadores, cuanto más fluido, mejor, pues las fórmulas demasiado densas tienden a cuartearse y marcar más las arrugas y líneas de expresión. Utilízalo en las zonas en las que sea realmente necesario y aplícalo con ligeros toquecitos.

Labios con un efecto muy juvenil

Conforme vamos cumpliendo años, la producción natural de colágeno disminuye, por lo que hay que elegir cosméticos con fórmulas que aseguren una completa hidratación e incidir en aquellas zonas con más tendencia a la sequedad como suelen ser los labios. Hidrátalos con bálsamos ultra nutritivos que contengan vitamina E y colágeno, que asegurarán que estén muy jugosos. A la hora de maquillarlos, los nudes, rosas y melocotón son elecciones perfectas para un look fresco y juvenil.

El importante papel de las cejas y pestañas

Marcar la mirada también contribuirá a que te veas con menos años, pero en lugar de aplicar demasiado eyeliner, resulta más efectivo y favorecedor trabajar la forma y grosor de las cejas y pestañas. En el primer caso, conviene que las rellenes con un lápiz o sombra del mismo tono sin exagerar la definición para encontrar un equilibrio que realce su forma natural. Con las pestañas, elige máscaras que ofrezcan longitud en lugar de un volumen excesivo, ya que puede resultar abrumador en pieles maduras. Un rizado suave puede abrir los ojos y dar una apariencia más juvenil.

Respecto a las sombras que mejor funcionan, los tonos neutros y cálidos son los mejores. También los marrones suaves, terracota y rosas sutiles, ya que pueden iluminar la mirada sin resultar demasiado excesivos. Evita las tonalidades con demasiados brillos, y cuando busques un look más especial, aboga por las texturas satinadas que se verán mucho más elegantes.

Los componentes que no pueden faltar

A la hora de renovar las cremas y demás cosméticos, hay ciertos componentes que deben estar más presentes que nunca como los siguientes que se indican a continuación.

-Ácido hialurónico: la estrella para las mujeres maduras gracias a su capacidad de retener el agua, ayudando así a mantener la piel hidratada y reduciendo la apariencia de líneas finas y arrugas.

-Retinol: derivado de la vitamina A, es conocido por sus propiedades antienvejecimiento. Estimula la producción de colágeno, minimizando la aparición de arrugas y mejorando la textura de la piel.

-Péptidos: son aminoácidos que desempeñan un papel crucial también en la producción de colágeno. Al integrarlos en los cosméticos, se refuerza la firmeza del cutis, ayudando a combatir la flacidez y promoviendo una apariencia más tonificada y rejuvenecida.

-Antioxidantes: a medida que envejecemos, la piel se vuelve más susceptible al daño ambiental y en este caso los antioxidantes, como la vitamina C y E, son esenciales para combatir los radicales libres y protegerla contra los efectos negativos del sol y la contaminación.