Uñas carey, la inesperada tendencia en manicura para este invierno
Este invierno las tendencias en uñas son muy claras
Triunfan los tonos burdeos, el verde oliva o el marrón chocolate
Pero las uñas carey han irrumpido con fuerza como la manicura más chic de la temporada
El invierno parecía no deparar sorpresas en cuanto a los colores de uñas que iban a triunfar. Este es el año de los tonos burdeos, marrón chocolate y el favorecedor verde oliva. Pero siempre hay un hueco para lo inesperado, y así hemos comprobado que las uñas carey son tendencia. Si pensabas que el nail art atravesaba un momento de pausa es porque aún no te habías detenido en las mejores manicuras carey de la temporada. Rozan el animal print, pero con un punto de elegancia que las hace muy versátiles y perfectas para llevar en el día a día.
Uñas carey o uñas tortuga
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El carey es un material translúcido con manchas marrones que recuerda al caparazón de las tortugas. De hecho, existe una especie de tortugas que se denominan así, por lo que el término “uñas tortuga” o “tortoise nails” también se emplea para hacer referencia a esta manicura de tendencia.
Cómo se hacen las uñas carey
El efecto carey se consigue mezclando diferentes tonos de esmalte, que oscilen entre el marrón y el naranja, incluyendo el mostaza, y añadiendo unos toques de color negro. Para conseguir un acabado perfecto no hay nada como ponerse en manos de una profesional, pero si eres de las que tiene maña con el esmalte y el pincel, comienza con el color más claro como base. A continuación podrás mezclar esmalte transparente con los tonos más oscuros para ir haciendo las manchas propias del carey.
Cómo llevar las uñas carey
La manicura más clásica, con todas las uñas iguales y no excesivamente largas, es una fórmula de éxito para llevar el carey este invierno. Son elegantes y modernas al mismo tiempo, esa combinación que tanto nos gusta.
Elegir el carey para una manicura francesa es de guapas, saber ser cool y tradicional al mismo tiempo, tener rollazo pero mantener un punto discreto. Sin duda, una de nuestras propuestas favoritas.
Si estás dudando entre elegir para tu manicura un tono burdeos, que es apuesta segura, o algo más rotundo como el carey, no tienes que renunciar a nada. Las dos tendencias se integran a la perfección y nos dejan una de las manicuras más bonitas de la temporada.
Y si eres más bien de tonos nude, con un punto discreto, pero te gustaría arriesgar un poco, disfruta de las licencias del nail art y reserva el carey solo para algunas uñas, las que te apetezcan, y mantente fiel a tu estilo.
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