El encrespamiento del cabello no es algo exclusivo de los meses de verano. Cuando llega el otoño y el invierno, el clima se vuelve húmedo y el vapor en el ambiento aumenta, aunque no estemos junto al mar. Y ya sabemos que la humedad y el encrespamiento van de la mano, por lo que es posible que estos meses notes tu pelo seco, poco manejable y con el dichoso frizz que tan poco nos gusta. Acabar con él y presumir de un pelo hidratado y con brillo es posible. Solo se trata de incorporar a tus rutinas de cuidado del cabello estos consejos para evitar el encrespamiento en invierno.

No te saltes nunca utilizar uno de estos dos productos cada vez que te laves el pelo. El encrespamiento es consecuencia de la deshidratación que sufre tu cabello, y necesita que el acondicionador o la mascarilla lo suavicen y alisen, creando una capa impermeable en las cutículas. Hay líneas específicas para combatir en encrespamiento que pueden serte de gran ayuda. Aplica siempre el producto en medios y puntas, y deja que actúen el tiempo que indique cada fabricante antes de aclarar. Y a ser posible, ya sabes, que el último aclarado sea con agua fría.

Si usas a diario herramientas de calor como el secador, las planchas o las tenacillas, es prácticamente inevitable que tu pelo se vea reseco y estropeado. Limita su uso todo lo que puedas, deja el pelo que se seque al aire el mayor tiempo posible y utiliza siempre la temperatura más baja que puedas con el secador. Además, no te olvides de la importancia de aplicar un protector térmico en el cabello, especialmente si vas a usar planchas o tenacillas.

Por lo general, someter al cabello a técnicas de decoloración como tintes y mechas pueden alterarlo y hacer que pierda su fuerza. Y cuando esto ocurre, el encrespamiento no tarda en aparecer. Sabemos que es casi imposible no pasar por la peluquería para tapar las canas, dar reflejos con mechas, etc. Pero durante estos meses es conveniente no pasarse con las alteraciones del cabello o someterlo a cambios bruscos de color.

Los sérums para el cabello son el complemento perfecto para hidratar, cerrar cutículas, proteger y evitar el encrespamiento. Ten uno siempre a mano y no dudes en aplicarlo en el pelo en los días de lluvia, de mucha humedad o de viento. Lo ideal es que lo apliques solo en medios y puntas, pero si ves que la parte superior del cabello se encrespa, utiliza el resto de productos que te quede en las manos para darle unos ligeros toque a esa zona.

No es necesario que vayas todo el otoño-invierno con el pelo recogido, pero sí juega a tu favor que en los días de clima más inestable recurras a ellos. El cabello suelto es más propenso a sufrir inclemencias como el viento, la lluvia, la humedad o los agentes contaminantes, y todo eso le lleva a encresparse. Así que no dudes en sacarle el máximo partido a coletas, trenzas o moños desenfadados. Seguro que te quedan genial ¡y evitarán el frizz!