La cuarentena nos ha permitido ver su faceta más espontánea y natural. Y eso que de ambas sus redes sociales estaban ya más que sobradas. Cristina Pedroche ha aprovechado para convertirse en gurú del yoga y cocinar junto a su chico. Ahora que ha retomado sus compromisos profesionales, la presentadora ha querido hacer balance de cuál ha sido su cambio físico durante esta etapa.
Hace unas semanas, la madrileña se subía a la báscula y confesaba cuánto peso había cogido durante el confinamiento. Y con anterioridad, al inicio de la desescalada, ya pudimos verla retomando algunas de sus antiguas rutinas de cuidados, como el tratamiento de maderoterapia, con el que Pedroche mostraba cuánto líquido había retenido durante estos meses.
En las últimas horas, hemos podido ver a Cristina raelizándose otros tratamientos de belleza: se ha sometido a una hidratación facial y a un 'oil therapy' para fortalecer el cabello. Y se ha grabado en sus stories de Instagram durante el proceso. Ha sido entonces cuando hemos podido ver al natural una de las partes de su rostro: sus cejas.
La propia Cristina lo ha confirmado posteriormente, reconociendo que se había dado cuenta de que tenía las cejas "superdespobladas", muy grises y "transparentosas". Y ha sido entonces cuando ha confesado su truco de belleza para mantenerlas perfectas: teñírselas. Por eso se ha grabado durante el proceso del tinte, compartiendo posteriormente el resultado final.
En primer plano, Pedroche ha mostrado sus cejas visiblemente más oscuras y brillantes que en sus stories previos. Ha descartado que las canas sean un motivo y ha reconocido que se trata más bien de que le gusta que estén muy rellenas y oscuras. "Como el color de mi pelo", ha reconocido, aunque ha avisado de que el resultado final sería otro.
Una vez retirado el exceso de producto, Cristina ha compartido el aspecto de sus cejas listas. "Más definidas y más bonitas", las ha definido. Según sus palabras, el tinte es una técnica que utiliza "de vez en cuando" para coger color y rellenar los posibles huecos. Además, ha reconocido que, siempre que se maquilla, las rellena un poco con el lápiz de cejas. Con respecto al tinte escogido, Cristina ha recomendado a su público que consulte en su peluquería o centro de estética habitual, y que se informen de posibles alergias antes de aplicarlo. "Quedan monísimas", ha concluido.
Hace solo unas semanas, la mujer de Dabiz Muñoz confesaba a sus casi tres millones de seguidores que no se encontraba especialmente a gusto. "Creo que hoy es el día que más fea estoy de mi vida, me viene bien hasta la mascarilla porque lo disimula", argumentaba en sus redes. Y para demostrarlo, decidía quitarse este complemento ya imprescindible y mostrar su rostro al natural antes de pasar por maquillaje y peluquería para poder entrar en plató.
Con la cara lavada y sin pintar, la madrileña reconocía no tener su mejor día. Cristina se lamentaba de sus ojeras y señalaba la aparición de una calentura, que le hacía parecer tener una "boca de pato". "Estoy feísima […] Esta es mi realidad", comentaba divertida.