El verano está para arriesgar, y mucho más el de este 2020, después de haber pasado toda la primavera y parte del invierno confinados sin poder salir de casa y, además, este verano se presenta como uno diferente. No se nos ocurren más motivos para animarnos y probar algo diferente. Y lo mejor para hacerlo es empezar por nuestras uñas.

Llevar las uñas pintadas se ha convertido, prácticamente, en algo obligatorio. Durante todas las temporadas anteriores de parte de 2019 y lo que llevamos de 2020 hemos visto cómo primero las uñas de gel y después el 'nail art' se han ido poniendo de moda hasta ser algo que no paramos de encontrarnos en nuestro 'feed' de Instagram. Y es que, ahora, las uñas cuanto más originales y llamativas, mejor. Y eso es algo que no les falta nunca a las uñas de verano.

Y es que, aunque seguiremos viendo dibujos en nuestras uñas durante toda la temporada estival, los colores del verano serán más que suficientes para convertir nuestras manos en las auténticas protagonistas. Porque esta vez llegan cargados de personalidad. Colores iridiscentes, tonos ácidos y eléctricos, pasteles que resaltan el moreno, mezclas de ellos o el tie-dye que también llega a las uñas. Estas son todas las tendencias de verano de uñas en lo que a colores se refiere que van a marcar el ritmo del verano, ¿te atreves con ellas?

Este verano se llevarán los colores fuertes. Y si hay uno de ellos que sale a escena cuando llega el calor ese es el rosa. Pero la tendencia del verano 2020 no pasa por cualquier rosa y si, hasta el momento, verano tras verano habíamos lucido sobre todo el fucsia, y aunque esta temporada también lo llevaremos, sobre todo teñiremos las uñas de rosa chicle. Al ser un tono más suave que el fucsia, se adapta más a todos los gustos y hace que las manos parezcan más cuidadas, además de potenciar el bronceado.

La iridiscencia ha sido, en general, una de las tendencias estrella durante todo el 2020. Lo hemos visto sobre todo en mochilas, abrigos y zapatos heredando la personalidad del metalizado. Y, desde hace varios meses pasa también a las uñas. Llévalas sin anillos para dejarles presencia a ellas mismas. Porque las uñas iridiscentes brillan sin necesidad casi de luz y son el resultado de la mezcla de muchos colores que se ven al contacto con la luz al moverse. Personalidad no les falta.

Otra de las tendencias del verano que no dejamos de ver en la moda y que pasa al universo de la belleza con las uñas es el tie-dye. Ese desteñido típico de los antiguos hippies y que sale a relucir sobre todo en verano, ha llegado para quedarse. Y su confirmación es verlo ahora en las manicuras. Eso sí, para conseguir estos tonos en las uñas no es tan fácil como en la ropa, que solo consiste en aplicar lejía sobre la prenda y dejarla actuar, aquí se necesita cierta técnica, minuciosidad y precisión, por lo que deberás acudir a hacértelas a un centro especializado en 'nail art' como es Siberia Salon, donde dominan el tie-dye para uñas.

Aunque los colores pastel parecen algo 'naif', eso es algo que solo ocurre en invierno, cuando pasan más desapercibidos, pero en verano quedan incluso mejor que los más eléctricos. Como el blanco, estos potencian el bronceado y además hacen que las manos parezcan más limpias, finas y delicadas. La tendencia de este verano 2020 pasa por llevarlas salteadas, como si fueran un paquete de caramelos de colores, pintando una uña de cada tono pero estos deben ser complementarios. No pasa nada si repites alguno, peor lo importante es que combinen entre ellos y que no sean siempre muy iguales. También puedes pintarlas en forma de degradado, es decir, de más a menos fuerte o viceversa.

Si para algo es el verano es para atreverse, porque en verano todo vale. Así que, esos colores que pensamos que son demasiado atrevidos para lucir cuando mandan la rutina, el trabajo y las diferentes obligaciones de nuestro día a día en las que las extravagancias se condenan y debemos adaptarnos a unas normas de estilo, tienen que salir a escena ahora. Uno de ellos es el amarillo. Pero lo bueno que tienen los colores de las prendas del verano es que pegan y coordinan con todo y sino, se crea un contraste muy lineal. Es el momento de probar suerte con el amarillo, que siempre tiene más retractores que seguidores pero queda genial con el moreno.

En esta misma línea está el verde. No apuestes por un verde demasiado potente, sino tirando a cítrico, como es el lima, un color tendencia en verano por excelencia. Crea el mismo efecto que el amarillo con el moreno, se relaja un poco su excentricidad pero sin pasar desapercibido, solo se mimetiza mejor en el look que cuando estamos completamente blancas.