La manicura francesa en versión invierno 2022, a la que ya se ha apuntado Natalia Osona, es la nueva obsesión de Instagram. Consiste en pintar la uña en un color natural y aplicar en el borde una tonalidad invernal que contraste.

La manicura francesa clásica es una interpretación refinada de la uña natural, que se realiza aplicando una base de tono rosado muy claro y se remata con una línea de esmalte blanco en el borde de la uña. Para un acabado perfecto hay que dar una capa de brillo sobre ambos esmaltes.

Durante el verano fue una auténtica tendencia llevar la manicura francesa de una manera mucho más fresca y juvenil, en la que el borde blanco se sustituía por tonos pastel o flúor. Se la vimos a María Pombo, María Fernández Rubíes o Marta Lozano y este invierno vuelve con nuevos códigos a conquistar el corazón de mujeres como Natalia Osona o Grace Villarreal.

Para que esta manicura quede perfecta es importante contar con cierta destreza para que el trazo del borde sea uniforme e idéntico en cada uña, aunque siempre tienes la opción de acudir a un salón o utilizar trucos como las plantillas para una correcta ejecución.

Así se lleva la nueva manicura francesa de invierno, que se pasa a los colores más oscuros e introduce algunas asimetrías.

La influencer Natalia Osona ya compartía en verano algunas versiones de la nueva manicura francesa en la que dejaba espacio para los tonos más suaves del Pantone. Con la llegada del otoño esos tonos suaves dieron paso a colores más profundos y a algunas apuestas arriesgadas.

En septiembre apostaba por una manicura asimétrica en la que el rosa nude y el verde bosque, un tono sofisticado y muy otoñal. Su apuesta no se queda solo en reinventar la manicura francesa, sino que introduce el factor asimetría alternando con ella una base lisa en rosa y dos en color verde, pero repitiendo el patrón en ambas manos.

Su segunda apuesta, ya entrado octubre, es utilizar el mismo tono rosa de su manicura anterior y combinarla con un esmalte en color chocolate. En esta ocasión ha decidido correr más riesgos llevando una manicura diferente en cada mano y alterna la base lisa con una manicura francesa al uso, decorando todo el borde de la uña, con otra en la que el trazo exterior se pinta en diagonal.

En el mes de noviembre sorprendió con una nueva versión de la manicura francesa, esta vez en un tono entre burdeos y marrón, en la que aplica estrictamente la técnica de la manicura francesa tradicional con todas las uñas maquilladas de la misma forma.

Esta ha sido también su opción para el mes de diciembre, una apuesta versátil que puede combinar con cualquier estilo, de los looks más casual a los más sofisticados.

Quien también se ha apuntado a la manicura francesa de este invierno es Grace Villarreal, que elige el rojo como color de contraste para el borde de la uña, aunque a diferencia de las apuestas de Natalia Osona, elige un tamaño de uñas corto para lucir la manicura de moda.