Disfrazarse y divertirse en la noche de Halloween no es incompatible con llevar la mascarilla anticovid puesta y conseguir que se camufle perfectamente con tu look más terrorífico.
Hay modelos pensados para esta fecha entre los que puedes encontrar calaveras, fantasmas, catrinas, hombres-lobo e incluso las caras de algunos de tus personajes favoritos de terror. También puedes esconder una mascarilla corriente bajo una máscara rígida o detrás de una máscara de gas e incluso hay muchas posibilidades de tunear una mascarilla corriente para adaptarla a tu disfraz y maquillaje de Halloween.
Crear efectos de polvo y sangre, coser sobre ella abalorios en forma de bichos y cruces, convertirla en un deshecho de vendas putrefactas, recrear tu maquillaje de catrina, forrarla con cadenas y elementos puntiagudos o simplemente pintarla con telarañas son algunas de las opciones con las que triunfarás en la noche de los muertos de 2021.
Si quieres ahorrar tiempo, lo más sencillo es buscarte una mascarilla que te sirva de protección y que vaya decorada con algún elemento alusivo a la noche de Halloween. La oferta del mercado es muy amplia, sólo tienes que dar con la que más se adecúe al maquillaje y disfraz que hayas elegido para la noche del 31 de los muertos vivientes.
Otra opción, algo más asfixiante, es tapar tu mascarilla con una máscara rígida o una de látex. Las apuestas de este año van muy en la línea de 'El juego del calamar', pero siempre puedes recurrir a clásicos como el Dr. Peste o la cabeza de zombi.
La máscara de gas es una opción muy efectista para la noche de Halloween y servirá para cubrir tu mascarilla. Puedes usarla tal y como llega de la tienda o tunearla con tachuelas y pinchos para crear una pieza única y exclusiva.
Otra opción, mucho más sencilla es utilizar un trozo de tela a modo de bandana para cubrir la mascarilla. Solo necesitas una pequeña calavera y unas cadenas para darle un aire terrorífico, pero puedes añadir cualquier elemento, desde manchas de sangre a ojos colgantes.
Una de las opciones más sencillas es convertir una mascarilla de protección corriente en un terrorífico amasijo de sangre semicoagulada. Utiliza pintura roja y negra para crear el efecto de vómito sangriento.
Una mascarilla negra se puede convertir en una mascarilla de Halloween con solo coser encima con hilo blanco o pintar con rotulador unas telas de araña. Se trata de una apuesta sencilla que necesita poca maña para que resulte efectista. Puedes incluso crear este efecto sobre una tela negra y coserla a tu mascarilla, así será más sencilla la ejecución.
Una mascarilla polvorienta es una opción perfecta para un disfraz de zombi y es tan sencillo como maquillarla igual que tu cara en tonos blancos y grises. Para dar un aspecto sucio a la mascarilla, utiliza las mismas sombras de ojos que has usado para crear tu maquillaje.
Otra manera de tunear tu mascarilla para la noche de Halloween es llenarla de vendas o gasas. Puedes usar vendas limpias a modo de momia, o desgarradas y manchadas con efecto sangre, que resultará bastante más desagradable.
Puedes hacer de tu mascarilla una obra de arte si te dedicas a coser y pegar abalorios. Recurre a cualquier elemento que vaya en consonancia con tu disfraz, o simplemente añade cualquier tipo de pieza cortante, desde cuchillos a tijeras o hachas, iconografía religiosa como las cruces, o bichos como arañas, murciélagos o serpientes.