Sin salir de casa... ¡y sin calor!: trucos infalibles para rizar el pelo sin dañarlo

La vida es así. Quien tiene el pelo rizado quiere tenerlo liso y viceversa. Pero además el pelo rizado y ondulado está de moda. Y no es de extrañar porque sienta genial y además hace que crezca que nuestra melena es más densa, que tiene más volumen y movimiento y tome mucha más presencia y personalidad. Así que, pocas son ya las que no hayan probado, aunque sea una vez, a rizarse u ondularse el pelo. Y es que, además, ves otra versión de ti misma.

Pero la forma más fácil de hacerlo siempre ha sido con plancha o tenacillas e incluso con secador y cepillo, aunque esta ha sido la forma menos utilizada por no quedar las ondas muy definidas, o también el clásico moldeador si estábamos seguras de que queríamos unos rizos permanentes. Pero estos sistemas terminan dañando el pelo porque se utiliza gran cantidad de calor para que la fibra capilar tome otra forma aunque sea solo por unas horas, a pesar de que utilicemos protectores térmicos previamente. Y de la permanente ya mejor ni hablar de ella. Además, con los rizadores y tenacillas, que son los instrumentos más utilizados, se tarda mucho tiempo (aunque depende de la melena) y acaba siendo algo cansado.

Aún así, que no cunda el pánico porque vas a poder rizar el pelo mucho más porque sabemos cómo rizar el pelo sin calor o más bien, cómo rizar el pelo de forma natural, porque lo cierto es que solo necesita un poco de ayuda para tomar esa forma él mismo. Espuma y demás productos para rizar el pelo liso, recogidos, pañuelo, papel higiénico (por raro que suene). Toma nota de estos trucos para saber cómo ondular el pelo sin calor de una vez por todas.

Sin duda, esta es la opción más sencilla. Son productos para rizar el pelo liso, principalmente, pero también el ondulado, para hacer mucho más marcada la onda. Además, son productos muy prácticos y cómodos, no solo porque su aplicación sea rápida, sino porque pueden aplicarse en cualquier momento. Si aplicamos la espuma justo después de la ducha, quedará con un efecto mojado, mientras que si es seco, el pelo se hará más fosco.

El spray de agua marina o de sal, sirve sobre todo para crear esas ondas surferas que tanto éxito tienen en verano. Estos sprays ayudan a simular el mismo efecto que tiene nuestra melena cuando acabamos de salir del agua y el pelo se seca al aire. Puedes aplicarlo con el pelo húmedo, pero no mojado para que no que el pelo apelmazado, pero al tratarse de pulverizaciones, se recomienda aplicar en seco y dar forma con los dedos. La espuma también se aplicará “estrujando" los mechones con el producto para plegarlos y crear efecto rizado. Uno de esos sprays es el Salty Mist de María Nila, que cuesta 25 euros.

Los recogidos más clásicos no solo sirven para las ocasiones más especiales, también es el peinado ideal para ir a dormir si quieres tener el pelo rizado. Hazte un moño alto justo antes de ir a dormir. Tiene que ser alto y algo ajustado para que se recoja cuanto más pelo mejor en el moño. Recógelo enroscando el pelo y después agarrando el resultado con una goma. A la mañana siguiente tendrás el pelo rizado.

Algo similar ocurre con las trenzas, pero las ondas serán más suaves. Divide el pelo en dos mitades y haz dos trenzas. A la mañana siguiente deshazlas y mueve la cabeza para que el pelo se coloque y listo. La mejor opción son las trenzas de raíz. Ahora, si prefieres unas ondas más pequeñas, el secreto está en hacer más trenzas. Así ganarás también más volumen.

Si queremos saber cómo rizar el pelo de forma natural, la respuesta es con los rulos. Ya lo hacían así nuestras abuelas y hasta muchas mujeres antes que ellas. ¿Cuántas veces hemos oído eso de “cogerse los rulos”? Tienes que enroscar cada mechón del grosor que quieras en una de estas piezas y después sujetar ese pelo con una horquilla o un pincho en el rulo. Pon una redecilla para que no se estropee mientras duermes con la almohada y a la mañana siguiente solo tendrás que soltarlo. Eso sí, es un sistema mucho más lento y se pierde más tiempo cogiendo los rulos y luego deshaciéndolos que con otras opciones.

También puedes hacer lo mismo aunque no tengas rulos. Crea pequeños caracolillos con cada mechón y sujétalos con horquillas.

Coge un pañuelo más o menos largo pero no demasiado grande, haz una coleta alta y después échala para adelante y cubre por debajo la goma con un pañuelo. Después, comienza a enrollar la coleta con el pañuelo hasta que esta se convierta en una especie de recogido alto. Ciérralo con el final del pañuelo como si fuera un moño y déjalo reposar toda la noche. Pero la mejor forma de hacerlo es creando una corona con papel higiénico. Retuércelo para hacerla rígida con cuidado de que no se rompa el papel, especialmente en el nudo que la termina. Colócala sobre la cabeza y empieza a meter el pelo por dentro de la corona. El resultado serán unas ondas cargadas de movimiento.

El papel higiénico puede ser uno de los elementos más útiles de nuestra casa. En concreto, para peinados, con él puedes rizar el pelo muy fácil. Enroscándolo a lo largo como si fuera un mechón más de una trenza alrededor de cada mitad del pelo. Déjalo un par de horas y listo.

Este truco lo defiende siempre María Pombo. La influencer lo aprendió de su hermana Marta y consiste en cepillarse el pelo antes de mojárselo, de tal forma que ya está desenredado. Al salir del agua, dejamos secar el pelo al aire y lo movemos un poco con los dedos para separar los mechones. Así se ondulará.

Para que sea más fácil rizar el pelo, el corte ideal es a capas, aunque no demasiadas ni muy marcadas, pero sí ligeras para que ya de por sí el pelo cobre su forma rizada o algo de movimiento y después, cuando le demos una ayuda con estos trucos, sea más fácil rizarlo. Añade un extra despuntando la melena.