Del lifting no quirúrgico de Aniston al spa orgánico de Corberó: los tratamientos de belleza favoritos de las vips

Acabar con los signos de cansancio y estrés, aportar luminosidad, hidratación y firmeza al rostro, difuminar manchas y arrugas y, en definitiva, devolver a la piel parte de su juventud o al menos detener el paso del tiempo, son los objetivos que se persiguen con los tratamientos de belleza que se realizan en cabina por profesionales de la estética.

Actrices, modelos y otras vips como Jennifer Aniston, Úrsula Corberó, Helen Lindes o Tamara Falcó, no han dudado en compartir con sus seguidores algunos de sus tratamientos y rituales de belleza: ultherapy, micropeeling, radiofrecuencia, mascarillas de oro y plata, dermoabrasión, ultrasonido, fotoestimulación…, existe un tratamiento para cada necesidad y estos son los favoritos de las vips.

Jennifer Aniston es una de las mujeres más admiradas de Hollywood, algunos medios la consideran la mujer más sexy del mundo y, desde luego, su rostro no refleja los 51 años que tiene. Cuando le han preguntado sobre el controvertido botox, ha comentado que no es muy fan, “sólo me cuido la piel, como bien, hago ejercicio y me encantan los láseres y otros tratamientos no invasivos como Thermage (radiofrecuencia) y Ultherapy (ultrasonido)”.

Ultherapy es un tratamiento facial que se realiza con ultrasonido focalizado de alta intensidad que estimula el colágeno en las capas más profundas de la piel, de manera que en las capas superficiales no se aprecia ni enrojecimiento ni irritación alguna, y cuyos efectos son los de un lifting sin cirugía: tensa la piel, remodela el óvalo facial, eleva los pómulos y tonifica el escote y el cuello.

Juana Acosta ha confesado su debilidad por la radiofrecuencia, la alternativa no quirúrgica para combatir la flaccidez (tanto en la cara y el cuello, como en el resto del cuerpo). Consiste en la aplicación de ondas electromagnéticas que aumenta la temperatura de la piel estimulando la producción de colágeno. Esto se traduce en más firmeza, elasticidad y luminosidad, oxigenación de los tejidos, mayor definición del óvalo facial y mejor calidad de la piel.

La aplicación de mascarillas faciales se debería incluir entre las rutinas caseras de belleza, como mínimo una vez a la semana, ya que suponen un extra de hidratación y nutrición para la piel.

Con independencia de los cuidados que se proporcionan en casa, Vicky Martín Berrocal y su hija Alba apuestan por acudir a su centro de belleza a mimar sus pieles con estos tratamientos-joya de láminas de oro y plata. Comienza con una limpieza y un peeling, la aplicación de un cóctel de sérums con ácido hialurónico y colágeno y finalmente se aplican las láminas de oro o plata, según las necesidades de cada piel. El resultado es una piel más descansada, luminosa, rejuvenecida e hidratada. Además, trata el enrojecimiento y las pequeñas líneas de expresión, aportando un tono uniforme al rostro.

Si lo que necesitas es exfoliar, pulir y oxigenar la piel, Helen Lindes te propone un micropeeling. Este tratamiento consigue eliminar las células muertas de la piel, mejorando visiblemente la apariencia del rostro, cuello y escote. Consiste en una exfoliación mecánica de las capas más superficiales de la piel con la que se consigue reducir el tamaño de los poros, mejorar el aspecto de las manchas, cicatrices y líneas de expresión, incrementar la elasticidad e igualar el tono.

Úrsula Corberó ha probado los tratamientos a base de flor de loto Lotus Defense de Pañpuri, una combinación de aromas, texturas y eficacia para el rejuvenecimiento facial. Este ritual comienza con una limpieza y exfoliación facial, continúa con un masaje del rostro y un drenaje linfático y finaliza con una mascarilla iluminadora e hidratación intensiva. Se acompaña de una infusión orgánica y masajes de manos, pies y cabeza.

Tamara Falcó se confiesa adicta a los masajes corporales tanto manuales como tecnológicos. Entre los primeros es fan del masaje Renata Franca, que estimula los canales linfáticos, elimina pesadez, toxinas e hinchazón y activa la circulación sanguínea. En cuanto a los masajes con aparatología destaca el LPG, que moviliza y libera la grasa localizada, activa el sistema circulatorio y el drenaje linfático y estimula la producción de ácido hialurónico.