¡Emplúmate! Los trucos para elegir el plumífero que mejor se te adapta
Comenzaron siendo parte del uniforme del cuerpo del ejército del aire, pasaron a formar parte del equipo imprescindible para deportes extremos y en los años 90 vivieron su máximo esplendor en la moda. Ahora han vuelto para acompañarte a todas partes, pero realmente ¿sabes lo que te estás comprando? Te contamos cómo leer la etiqueta para que decidas qué plumífero es el mejor según para qué lo quieras.
Es la prenda perfecta para soportar bajas temperaturas y aunque las plumas de pato y ganso llevan cientos de años protegiendo del frío a la humanidad, fue en 1.940 cuando Eddie Bauer decidió hacer chaquetas y abrigos acolchados rellenos de plumas.
Para qué quieres el plumífero: cómo leer la etiqueta
Los plumas se multiplican en la ciudades, pero no todos son iguales. Es cierto que las calidades van generalmente asociadas al precio, aunque el diseño también puede influir en éste, aún así hay marcas con las que no fallarás como Canada Goose o Moncler. Pero ¿cómo elegir el pluma adecuado según el uso que le vayas a dar?
Hay tres planteamientos básicos a la hora de enfrentarte a la etiqueta de un plumífero. En primer lugar si el relleno es de pluma de ganso o de pato y, en este caso, si es de duvet, la calidad suprema en lo que a pluma se refiere. En segundo lugar, debes tener en cuenta el porcentaje de plumón frente al de cañón de pluma (80/20, 90/10…): a más plumón, menos peso.
El pluma no da calor, retiene el de tu cuerpo según su 'fill power'
Teniendo en cuenta que la pasarela y la calle van de la mano, muchas firmas y diseñadores se han apuntado a la tendencia del plumífero. Algunas versiones pueden llegar a ser un verdadero lujo como la chaqueta estilo bomber de Fendi, cuyo precio ronda los 3000 euros, y no sólo por su interior, también por un exterior elaborado en seda de lana. Otros como Moschino con precios que se acercan a los 2.000 euros y diseñadores noveles como Jessica Walsh que reinventan patrones y volúmenes para mujeres osadas como Rihanna.
La tercera característica a tener en cuenta, muy relacionada con las anteriores, es el ‘fill power’ o la capacidad de hinchado de la pluma y para atrapar el aire caliente. Igual que el peso se mide en gramos, el ‘fill power’ se mide en cuin (‘cubic inches’ o pulgadas cúbicas). Si en un modelo normal esta medida alcanza los 400 o 500 cuin, en uno de gran calidad puede superar los 700.
Para la montaña y para la alfombra roja
Si en un principio los plumíferos fueron creados para soportar temperaturas extremas en deportes de montaña, con el tiempo han pasado a ser parte imprescindible del paisaje urbano invernal, por eso los modelos se han ido adaptando a los nuevos usos: es habitual ver a las vips pasear firmas como Moncler o Burberry en el ‘street style y hasta en el ‘photocall’.
A la hora de adquirir un plumífero es importante tener en cuenta que cuando la pluma está húmeda no cumple su función de aislamiento. Si vas a usar la prenda para hacer deporte al aire libre, es importante tener en cuenta el tejido exterior por dos razones: la primera es porque puede aligerar o hacer que el plumífero pese más, la segunda es porque la pluma mojada deja de tener propiedades aislantes, aunque esto no significa que no lo laves, debes hacerlo al menos una vez al año. Para solucionar este escoyo, muchos fabricantes están utilizando tejidos hidrófobos que evitan que la humedad llegue al interior sin que la prenda pierda la capacidad de transpirar.
No es pluma todo lo que reluce: los beneficios de las fibras sintéticas
Aunque de manera genérica se habla de plumíferos, en ellos tienen cabida muchas prendas de abrigo que se componen de fibras sintéticas como Primaloft, Thinsulate, Thermolite o Polartec Alpha. Estas fibras sintéticas tienen buena capacidad aislante, son transpirables y la velocidad de secado es muy superior a la de la pluma, además le sacan ventaja a ésta porque mantienen gran parte de sus propiedades aunque la fibra esté húmeda.
Si aún no sabes cuál es tu pluma perfecto, aquí van unos consejos: para deportes en climas extremos o si buscas un todoterreno para climas secos, el mejor es el relleno de pluma con una relación de plumón/cañón de pluma superior a 90/10. Para que aguante las nevadas o las lluvias ligeras, uno de pluma con tratamiento hidrófobo y si necesitas que soporte la humedad, elige mejor el de fibra sintética.